Dos hombres, fichados por los servicios secretos por su radicalismo islámico, fueron detenidos este martes en Marsella ante las sospechas de que preparaban un atentado "inminente" en vísperas de las elecciones presidenciales francesas que se celebran el próximo domingo y el 7 de mayo.
"Se ha conseguido prevenir un acto terrorista seguro", subrayó en una declaración a la prensa el ministro del Interior, Matthias Fekl, que señaló que el arresto lo llevaron a cabo agentes de la Dirección General de la Seguridad Interior (DGSI, los servicios secretos), apoyados por el RAID (cuerpo de elite de la policía).
La operación, precisó Fekl, seguía en marcha a primera hora de la tarde en el distrito tercero de Marsella, donde se estaba efectuando un registro con la intervención de los artificieros. De hecho, el canal BFMTV avanzó que se encontraron allí explosivos de tipo TATP.
El ministro indicó que los dos hombres (identificados como Mahiédine M. y Clément B. por la emisora France Info) nacieron en 1987 y 1993 y tienen nacionalidad francesa. También apuntó que se habían radicalizado y "tenían intención de cometer un atentado en territorio francés a muy corto plazo, es decir, en los próximos días".
De acuerdo con fuentes de la investigación citadas por France Info, su radicalización se produjo cuando estuvieron en la cárcel de Sequedin, en el norte de Francia. La DGSI atribuye a uno de los sospechosos una fotografía en la que se ve una ametralladora, una bandera del Estado Islámico, una partida de municiones y la portada del diario Le Monde del pasado 16 de marzo en la que aparecía el candidato conservador a las presidenciales francesas, François Fillon.
Sobre la base de esos elementos, el dispositivo de seguridad en torno a Fillon se ha reforzado desde el pasado viernes. La Fiscalía antiterrorista de París, de hecho, abrió la semana pasada una investigación preliminar por una amenaza inminente, pero su apertura no había sido confirmada hasta ahora.
El titular de Interior insistió en que "se está haciendo todo lo posible para garantizar la seguridad" de los comicios y que se desplegarán "más de 50.000" policías, gendarmes y militares para las jornadas de votación, en un contexto de "un riesgo terrorista que sigue siendo más elevado que nunca".
Fekl indicó que su departamento está "más movilizado que nunca para garantizar la seguridad de los franceses, el buen desarrollo de la campaña presidencial, la seguridad de los mítines", de las reuniones, los candidatos y sus cuarteles generales.