En Podemos siguen abandonando el barco. Esta vez, el secretario general de Podemos Peñíscola (Castellón), Víctor Blasco, ha presentado públicamente su dimisión del cargo por "la ausencia de participación de la ciudadanía", según ha indicado en un comunicado, en el que asegura creer "firmemente" en el proyecto de la formación morada, pero "no está listo para que la gente de Peñíscola lo entienda y trabaje por él".
El hasta ahora secretario general de Podemos en Peñíscola ha recordado que ya había advertido que si no creaban un tejido de lucha social, "carecía de sentido presentarnos a las elecciones municipales".
Es imposible obtener frutos donde no hay costumbre en la lucha social"
"Y dije tal cosa, pues ignorábamos quiénes podían infiltrarse en este proyecto grupal para usarlo en interés individual. Y también porque nos faltaba experiencia suficiente como para conocer la capacidad de trabajo y compromiso de cada una de las personas que se uniesen a este proyecto", ha añadido.
En esta línea, ha apuntado que "se ha demostrado que, en el largo plazo, el voluntariado de las personas se desgasta y la participación en los proyectos políticos cae en picado. Esto significa, que es imposible obtener frutos donde no hay costumbre en la lucha social, ya que nunca se ha trabajado de este modo en nuestra localidad".
El activismo de antaño
Por estos motivos, y viendo que muchas personas se han "alejado" de él por haberse significado políticamente, ha decidido "regresar al activismo social de forma individual como antaño, sin tomar partido de ningún movimiento político a nivel nacional".
Blasco ha explicado que desea "formar parte de un movimiento donde personas de cualquier grupo e ideología puedan trabajar en ausencia de prejuicios por una causa común: el bien de su pueblo y de la mayoría. Y así lo voy a hacer a partir de ahora".
He decidido regresar al activismo social de forma individual como antaño, sin tomar partido de ningún movimiento político
Blasco fue elegido como concejal del Ayuntamiento después de encabezar la lista denominada La Roca, junto a dos ediles más. Los tres renunciaron al sueldo que les correspondía en aras a su ideario político. Sus dos compañeros renunciaron también a su acta como representantes de La Roca y pasaron a integrar el grupo de ediles no adscritos, uno en septiembre de 2015 y el otro en febrero del pasado año.
En el mes de junio del 2016 Blasco anunció que reclamaría la restitución del sueldo al que renunció, para lo que ha presentado tres mociones al Pleno ordinario que se realizará el próximo jueves. En una reclama una dedicación parcial, en la segunda la recuperación del sueldo al que renunció y la tercera, una asignación para su grupo político.