El consumo de alcohol en España es un problema que preocupa a profesionales y autoridades. Completamente normalizado e incluido en planes y vida de ocio, este tipo de bebidas cada vez se consume desde edades más tempranas. Según el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), desarrollado a finales de 2023, España es el tercer país que más alcohol consume del mundo, con 11 litros por persona entre la población mayor de 15 años.
Para intentar frenar esta tendencia, sobre todo entre los menores de edad, las autoridades ponen en marcha un nuevo proyecto de ley para tratar de controlar el consumo de alcohol entre los más jóvenes, e incluyen nuevas medidas. A falta de dar el visto bueno, el Ministerio de Sanidad ya ha publicado el texto y aguarda la respuesta de las principales entidades del sector.
Nuevas medidas contra el consumo de alcohol
La normativa parece centrarse, sobre todo, en el cuidado y control de la publicidad. Este tipo de mensajes puede calar hondo entre los más jóvenes, por lo que las autoridades deciden prohibir los mensajes publicitarios negativos sobre la abstinencia o sobriedad, que resalten propiedades terapéuticas o que lo asocien al éxito social o profesional. Además de esto, obliga a incluir advertencias expresas sobre los riesgos de consumirlo durante el embarazo y la lactancia.
El Ministerio de Sanidad también habla de seis puntos que pueden favorecer el consumo de alcohol y con los que hay que ser especialmente cuidadoso.
- Mayor densidad de puntos de venta.
- Bares y restaurantes "con fácil acceso" al alcohol.
- Promoción de productos.
- Publicidad.
- Bajo precio.
- Horarios de venta amplios.
Así, las autoridades buscan actuar sobre algunos de ellos, en especial sobre el fácil acceso a las bebidas, la publicidad y el control de los horarios de venta: habrá nuevas restricciones.
La publicidad queda prohibida
Entre las medidas de control de la publicidad, destaca su desaparición en numerosas zonas de España. Si finalmente la normativa queda aprobada -algo que puede esperarse para 2025-, tan solo se permitirá el nombre comercial, denominación social y marcas o símbolos identificativos de las empresas en un perímetro inferior a 200 metros lineales de los accesos a zonas frecuentadas por menores, incluyendo centros sanitarios, de servicios sociales o parques.
La emisión de este tipo de mensajes quedará totalmente limitada en estos lugares: mobiliario de hostelería, transportes públicos, terminales, estaciones, marquesinas, eventos destinados a profesionales sanitarios, de enseñanza, asistencia social o deporte. Tampoco estarán permitidos en páginas web, aplicaciones o redes sociales, así como en ropa, calzado o artículos destinados a menores de edad.
Adiós a las máquinas expendedoras de bebidas
Finalmente, una de las medidas que más pueden llamar la atención es la restricción del acceso a las máquinas expendedoras. Estos aparatos, todo un clásico a altas horas de la mañana -cuando las tiendas de ciudades y pueblos se encuentran cerradas- estarán mucho más controladas que antes. El acceso a bebidas alcohólicas en estas máquinas expendedoras se analiza bajo lupa, y ahora quedará reducida a un horario específico.
El anteproyecto veta cualquier forma de venta o dispensación de productos con alcohol a menores, así como la que se haga de forma ambulante y sin licencia en plena calle y en los lugares y circunstancias que establece la legislación, pero, ¿hasta qué hora se podrá acudir a estas máquinas expendedoras en el caso de que la normativa salga adelante? Se exigirá que estos aparatos incorporen mecanismos capaces de comprobar la mayoría de edad. Además, comunidades y ayuntamientos podrán establecer restricciones horarias en la venta que, preferentemente, irán desde las 22 horas hasta las 8 del día siguiente.
