El 'popular' Pedro Antonio Sánchez, presidente de Murcia y salpicado por la investigación del juez Eloy Velasco sobre las andanzas de la trama Púnica en su comunidad autónoma, admitió de modo implícito a Vozpópuli una de las principales pruebas que obran en el sumario contra él. En concreto, un encuentro que mantuvo en octubre de 2014, días antes de las primeras detenciones, con Alejandro de Pedro, el 'gurú' informático especializado en gestionar la reputación 'online' de político que está imputado en la causa. Ante las reiteradas preguntas de este diario sobre dicho encuentro, en el que también participó su correligionaria Pilar Barrerio, entonces alcaldesa de Cartagena y hoy senadora, insistió que ya lo aclarará "documentalmente". Sánchez, que acababa de reunirse con el nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, aseguro que no había tratado con éste el contenido del informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que lo implica "porque no conozco la investigación judicial". Al encuentro en la Sede del Ministerio, el político murciano acudió acompañado de un asesor, David Conesa, que ya declaró como imputado ante el magistrado de la Audiencia Nacional el pasado mes de octubre.
Pedro Antonio Sánchez acudió al encuentro con el ministro del Interior acompañado con un asesor imputado precisamente en el caso Púnica
En sus respuestas a las preguntas de este diario, Pedro Antonio Sánchez admitió contactos con "esa empresa", en referencia a las mercantiles con las que De Pedro realizaba los trabajos de reputación 'online', aunque las inscribió dentro del trato que mantuvo con otras sociedades que le presentaban "propuestas a veces de lo mismo". Sin embargo, recalcó que "en la Región de Murcia, bajo mi responsabilidad y en lo que yo pueda decidir no se hizo nada" con la trama Púnica. "No se pagó una factura, ni se hizo un contrato ni se encargó un presupuesto ni se autorizó nada ni se ha movido ni un sólo papel en la Administración bajo mi responsabilidad" en este sentido. De hecho, señaló que "hay catorce certificado oficiales que acreditan que no se hizo nada" y que está dispuesto a callarlo "documentalmente y de forma oficial" ante la Justicia.
No obstante, se negó a aclarar si dimitiría, como le exigen sus pactos con Ciudadanos, en el caso de que el juez Velasco elevase una exposición razonada para que, en su condición de aforado, el Tribunal Superior de Justicia de Murcia le investigue. "Eso es un futurible", se limitó a decir. Pedro Antonio Sánchez, que en todo momento evitó hablar en primera persona y siempre utilizó el plural en sus respuestas referidas al trato con la trama, recalcó que durante el año que asegura que recibió de manera "muy insistente" las ofertas del 'gurú' informático Alejandro de Pedro, él y su equipo no tuvieron intención de contratarlo en ningún momento "porque nunca se quiso hacer" ni con las empresas de la Púnica "ni con otra similar". "Éstos son los hechos, que no hay hechos", insistió.
El sumario
La supuesta relación de Pedro Antonio Sánchez con la trama Púnica salió a la luz poco antes de las elecciones de mayo de 2015 que lo auparon a la Presidencia de la Región de Murcia. Hasta entonces había ocupado el cargo de consejero de Educación del Ejecutivo autonómico. Como adelantó entonces Vozpópuli, una conversación telefónica entre Alejandro de Pedro y una de sus empleadas en EICO Online Reputation Management SL, la empresa dedicada a trabajos de 'reputación online', desvelaba que la trama estaba a punto de contar entre sus clientes con el político murciano cuando la Guardia Civil realizó las primeras detenciones. Siempre según esta conversación, la mercantil de la red de corrupción iba a "limpiar para mayo" el historial en Internet del aspirante autonómico. La tarifa, 3.000 euros al mes.
En el sumario constan conversaciones entre De Pedro y una de sus empleadas en las que se habla de "limpiar" la imagen del hoy presidente de Murcia
Las sospechas se acrecentaron en mayo con el exhaustivo informe de la UCO que recogía trece correos electrónicos, una docena de llamadas de teléfono, seis documentos en formato digital, 35 mensajes de telefonía y la declaración de un testigo para detallar paso a paso todo el proceso de negociación seguido para realizar dichos trabajos de reputación 'online' finalmente frustrados. Según recogía este documento policial, De Pedro llegó a realizar en el verano de 2014 un informe "preventa" específico sobre Pedro Antonio Sánchez en el que se analizaba su presencia en las diferentes redes sociales (Facebook, Twitter y Youtube) y en buscadores. El resultado fue que el 70% de las informaciones que aparecían sobre él en Internet eran negativas, referidas sobre todo a distintas acusaciones judiciales que pesaban sobre él.
La reunión de Madrid
Ese informe fue presentado al propio político el 11 de junio de 2014 en una reunión celebrada en el Hotel de Las Letras, de Madrid, a la que también asistió su correligionaria Pilar Barreiro. Tras aquella reunión, que es la que en la conversación con Vozpópuli de este martes el político no ha negado, De Pedro siguió ofreciendo sus servicios al entonces consejero de Educación y, de hecho, ponían como ejemplo de su eficacia los trabajos que habían realizado para Lucía Figar, quien ocupaba ese mismo cargo en el Ejecutivo de Madrid y que actualmente está imputada en la causa. Finalmente, a finales de septiembre prepararon una oferta para Pedro Antonio Sánchez para el periodo que iba desde octubre de 2014 hasta el 31 de mayo del año siguiente, justo hasta las elecciones autonómicas en las que él finalmente encabezó la lista del PP. La Guardia Civil concluía en su informe que el acuerdo se cerró finalmente el 24 de octubre y que si no se llegó a materializar fue porque tres días después comenzaron las detenciones de los principales implicados en la trama, entre ellas las de De Pedro.
Un imputado ha reconocido ante el juez Velasco que hubo una reunión en un hotel de Madrid entre Pedro Antonio Sánchez, Alejandro de Pedro y la senadora del PP Pilar Barreiro
El documento policial resaltaba que dicho contrato iba a pagarse "a través de facturación en concepto de 'formación' con la Consejería" que entonces aún encabezaba Pedro Antonio Sánchez. Además, destacaba la participación en aquellas negociaciones de David Conesa, el miembro de su equipo que precisamente le ha acompañado a Pedro Antonio Sánchez este martes en su reunión con el ministro Juan Ignacio Zoido. La UCO destacaba que De Pedro intercambió numerosos mensajes con este asesor en los días previos a cerrarse supuestamente el trato. David Conesa declaró como imputado el pasado 4 de octubre. Un día después lo hacía también como investigado un empleado de De Pedro, quien confirmaba al magistrado los supuestos tratos entre la red de corrupción y el actual presidente del Ejecutivo murciano. Se trataba, en concreto, de Francisco Javier Bueno González, quien ya había declarado como testigo ante la Guardia Civil poco después de las detenciones de octubre de 2014 y ante el propio magistrado en abril del año pasado. Ahora, lo hacía como 'arrepentido' para aportar valiosos datos que presuntamente reforzaban los indicios contra el político, según adelantó el pasado 17 de octubre este diario. Entre ellos, que el fue testigo de la reunión entre el hoy presidente de Murcia y el 'gurú' informático de la Púnica en un hotel de Madrid que ahora el político murciano admite con medias palabras.