En la reunión con Muallem el enviado especial planea examinar las opciones disponibles para enviar inmediatamente ayuda humanitaria a la ciudad asediada, escenario de violentos enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y miembros de grupos terroristas, y donde el este de la ciudad, en manos rebeldes, está devastado.
Los siete hospitales de esta zona -- entre ellos el único centro pediátrico en kilómetros a la redonda -- han quedado completamente inoperantes por la última ola de bombardeos efectuados por las fuerzas del régimen sirio y sus aliados.