La actriz Blanca Suárez considera su segundo trabajo con Pedro Almodóvar, "Los amantes pasajeros", una "locura de comedida", y prefiere rechazar el apelativo de "chica Almodóvar" porque, en ese caso, se preocuparía si no volviera a llamarla para otra película. La cinta, que se estrenará en España el 8 de marzo, y en la que comparte cartel, entre otros, con Javier Cámara, Lola Dueñas, Miguel Ángel Silvestre, Hugo Silva y Willy Toledo, supone la vuelta al tono desenfadado del director que había teñido de "noir" sus últimas películas.
Tras "La piel que habito", el manchego ha querido contar de nuevo con ella pero para un registro totalmente opuesto, la comedia, aunque sea un género que, según Suárez, se le "escapa". "Es una locura, una comedia heavy y punky, la fantasía de todos los actores que hemos trabajado en ella", afirma la madrileña.
A pesar de la confianza que el director manchego ha depositado en ella, prefiere rehuir del apelativo "chica Almodóvar" y tomarse estos dos proyectos junto a él como algo esporádico. "He tenido la suerte de que me haya vuelto a llamar, pero es mejor que no lo piense porque acabaría pensando más en si me llama o no para una tercera que en las películas que ya he hecho con él". explica.
En sólo cinco años, y surgiendo de la pequeña pantalla, Suárez se ha convertido en uno de los rostros más conocidos del cine español. Pero no ha abandonado sus orígenes, ya que sigue afrontando proyectos para la televisión. Acaba de estrenarse la tercera entrega de El Barco, ficción de Antena3 en la que comparte protagonismo con Mario Casas, y a la que se ha referido como "la temporada". "Había que poner toda la carne en el asador y responder a todas las incógnitas. Ya no podíamos reservarles más cosas a los telespectadores. Si hay más temporadas, ya nos las ingeniaremos para inventar nuevas preguntas", apunta. Otro proyecto televisivo que tiene entre manos es una serie de cinco capítulos que prepara la misma cadena que adaptará para el público adulto algunos de los cuentos clásicos más famosos. Suárez protagonizará el último dando vida a Blancanieves, y comenzará a rodar en noviembre.
Desde que se diera a conocer, la joven actriz ha ido encadenando un proyecto tras otro. Se siente "afortunada" por ello, aunque reconoce que en ocasiones ha vivido momentos de verdadero estrés, ya no sólo por los rodajes, sino además por el vaivén constante de "viajes, festivales y sesiones de fotos". Se ha visto obligada a veces a rechazar proyectos por falta material de tiempo para emprenderlos. "Tiene que ser el proyecto de mi vida, de lo contrario prefiero no perder horas de sueño", matiza. El trabajo no le falta en España, algo "muy importante", y por el momento no le obsesiona salir al extranjero, aunque si la situación lo requiriera o le llegara una oferta interesante, estaría dispuesta a trabajar "en cualquier país".
Con 24 años recién cumplidos, Suárez puede presumir de uno de los currículos más prolíficos de su generación. No cree que el devenir de su carrera le haya cambiado, pero sí le ha obligado a hacerse mayor "muy pronto". "Desde que empecé han transcurrido siete de los años más importantes en la vida de cualquier persona. Aún estoy madurando, pero esta profesión te forma a marchas forzadas", admite.