El pan, la uva, los piñones, los chocos, las granadas… Son algunos de los alimentos que toman los personajes de Platero y yo, el libro escrito por Juan Ramón Jiménez que este año celebra el centenario de su publicación, y que han sido incluidos en un recetario que reúne una selección de platos inspirados también la cocina de Moguer, pueblo de Huelva donde nació el Premio Nobel y en el que hace poco se presentó en el libro realizado por los jóvenes cocineros Diego Blanco (Ciudad Real, 1984) y Jorge Estepa (Moguer, 1985).
Estos dos jóvenes chef se conocieron y se formaron en las cocinas de la Escuela de Hostelería Taberna del Alabardero hace ocho años. Cada uno emprendió su camino, trabajando en restaurantes y hoteles de cinco estrellas en varios puntos de España, hasta que hace dos años se volvieron a encontrar en Barcelona. Ahora llevan juntos un nuevo proyecto en Sevilla.
Tras recibir una propuesta del Ayuntamiento de Moguer, decidieron diseñar la guía, que lleva por título La Cocina de Platero. En ella buscan trabajar los productos tradicionales con técnicas y procedimientos contemporáneos, con la intención de reinterpretar los sabores de la tierra. Se trata de recetas actualizadas con las que fusionar los sabores moguereños del ayer con la cocina más contemporánea.
Con la intención de que este recetario amplíe y complete la apretada agenda del Año Platero, está previsto que una serie de restaurantes –identificados con el logo del año Platero- se hagan eco y ofrezcan algunos de los platos preparados y descritos por Blanco y Estepa en su libro de recetas. Uno de los platos estrella de esta esferificación de Platero, es un tartar de corvina con gazpacho de cilantro y gamba blanca, un producto típico en la costa onubense: Punta Umbría, Isla Cristina o Huelva.
Quienes completen la ruta de establecimientos y den buena cuenta del menú dedicado al libro podrán sellar su Pasaporte Platero, que puede retirarse justo antes de comenzar la ruta, en la Oficina de Turismo de Moguer o en la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez. Con este, el visitante podrá acumular puntos, no solo en los establecimientos hosteleros, sino también en otros lugares que incluyan las actividades del centenario.