Andrea Camilleri pasó cuarenta años trabajando como guionista y director de teatro y televisión. Hasta que, en 1993, con La ópera de Vigàta, se preguntó: "¿Soy capaz de escribir una novela empezando por el primer capítulo y siguiendo el hilo, sin saltos temporales ni lógicos, hasta el último?". La respuesta fue La forma del agua, primera entrega de la saga de novela negra dedicada a Savio Montalbano, el comisario de Vigàta, que salió publicada en 1994.
Ahora, Camilleri regresa ahora con La banda de los Sacco, su último libro publicado en España y donde se desmarca del universo del comisario Montalbano para adentrarse en un duelo entre la familia Sacco y la mafia y sus aliados en la Sicilia de principios del siglo XX.
Camilleri (Porto Empedocle, Sicilia, 1925) elige la localidad siciliana de Raffadali en los años veinte para situar la historia de los hermanos Sacco, hijos de Luigi Sacco. Hombres que considerándose libres y socialistas se ven de un día para otro amenazados por la mafia y desprotegidos por sus paisanos y los "carabinieri", todos ellos cómplices del mayor poder siciliano.
Esta historia, basada en hechos reales, ha podido ver la luz gracias al relato de Giovanni Sacco, un descendiente de esta familia italiana que también proporcionó documentos oficiales, escritos familiares y actas judiciales que sirvieron al escritor italiano para componer todos los hilos de esta obra.
Así, La banda de los Sacco (Destino) se une al resto de novelas de Camilleri ambientadas en la Sicilia de finales del XIX y principios del siglo pasado en las que relata, partiendo de historias reales, la realidad siciliana de la época y muestra que, en esencia, sigue siendo la misma que en la actualidad.
Camilleri vuelve así al género de la novela negra, tras haberlo enriquecido con más de treinta títulos que narran las desventuras del comisario siciliano Salvo Montalbano, personaje que creó en 1994 con La forma del agua, un éxito de ventas que se exportó a veinte países.
En este sentido, Montalbano ha propiciado que la obra del italiano haya sido traducida a más de treinta y cinco lenguas, y Camilleri sea en la actualidad una de las figuras más importantes de las letras en Italia, donde ha vendido más de veintidós millones de ejemplares de sus obras.
Un personaje, Montalbano, al que el autor bautizó así por la admiración que profesaba al escritor español Manuel Vázquez Montalbán, creador de otro detective literario, Pepe Carvalho. Camilleri, quien fue galardonado el pasado año con el premio Pepe Carvalho en el marco del festival de literatura criminal BCNegra de Barcelona, también ha destacado en otros estilos, como la novela histórica y el teatro. El escritor, que reside desde hace años en Roma, es además director de teatro y televisión y guionista.
