La decisión tenía meses fraguándose, pero fue ayer cuando se concretó la medida. Tras siete meses esperando respuestas del nuevo presidente de FAPAE, Ramón Colom, la Asociación Madrileña Audiovisual (AMA) decidió en su Junta General Extraordinaria abandonar FAPAE, la Confederación de Productores Audiovisuales Españoles, la patronal de los productores.
AMA, a asociación más grande de las que integran la patronal, con 44 productoras, abandona FAPAE, a la que pertenece desde 2009, porque cree que "no está manteniendo un espíritu de unidad en la defensa de nuestro cine y no tiene una hoja de ruta y de actuación conjunta a plantear ante organismos e instituciones, en un momento tan delicado para el sector audiovisual como el actual". Con esas palabras describió su directora, Puy Oria, la decisión .
"Es una decisión que viene de lejos" y ha advertido de que otras organizaciones están "nerviosas". "No creo que la decisión de AMA arrastre por sí sola a otras organizaciones, las veo a todas suficientemente serias e independientes como para que eso no suceda", declaró a la agencia EFE.
Donde sí colocó el acento la directora de AMA fue en el hecho de que es naceario replantearse la forma de ordenarse: "Tenemos que replantearnos todos que, a lo mejor (FAPAE), tiene que seguir otro modelo, otra estructura". Este es el penúltimo eslabón en una cadena que se ha ido rompiendo desde que el Gobierno decidió no dar al sector el respiro del reiteradamente solicitado aumento de la desgravación fiscal del 18% actual hasta un 30%, porcentaje más parecido al del resto de Europa.
A eso se ha sumado la imposición del 21% del IVA cultural, y el retraso en el pago de las ayudas automáticas, las que se conceden por amortización, correspondientes a 2012, una cantidad que alcanza los 40 millones de euros y que supera el propio fondo presupuestado para cine.
"Ayudaría muchísimo si el Gobierno hiciera hoy un gesto de apoyo al cine; no es fácil dirigir una asociación si estás viendo a tus compañeros, y a mi misma, que yo también soy empresaria, cerrando y pasándolo muy mal. Ante eso -apunta Oria-, las decisiones a veces son más drásticas".
Aún así, insiste en que la decisión de AMA se ha producido tras una acumulación de frustraciones y dentro del respeto al presidente de la patronal FAPAE, Ramón Colóm -"no es para nada una cuestión contra Ramón, ahí diferimos de otras posturas", señala en referencia al malestar transmitido hace unos días por el expresidente de FAPAE Eduardo Campoy- sino que el trasfondo es "una discrepancia en el modo de enfrentar la situación, lo que a lo mejor lo hace peor".
En ese sentido, la presidenta de los productores madrileños ha dicho que la situación de los empresarios del cine es similar a la del resto del país, pero advierte de que los productores no están por "desangrarse sin pegar un grito". "Intentaremos reconducir la situación, pero este sería el momento de que el Gobierno ayudase", ha opinado.