El sector editorial español acusa el golpe: publica 10.000 títulos menos que hace un año. Según cifras dadas a conocer en estos días, en España se publicaron un total de 36.323 títulos durante los seis primeros meses de 2013, es decir, alrededor de diez mil menos que en el mismo período del año pasado, cuando la Agencia ISBN registró 46.640 títulos.
Se reduce también considerablemente el porcentaje de libros editados en formato digital, que pasó de un 22% en 2012 a un 20% del primer semestre de 2013. Y así como Madrid y Cataluña registraron un crecimiento en el número de títulos editados al pasar de 20.068 libros en 2012 (publicados entre ambas) a 24.211 títulos en 2013, se acumula sin embargo una baja sensible de publicaciones en otras autonomías como Andalucía (1.208 libros menos), País Vasco (611 libros menos), Galicia (348 libros menos) o Aragón (523 menos).
Asimismo, Valencia cayó en su hegemonía en la edición de libros digitales (el año pasado 20%, éste 26%), para ser sustituido por Madrid, que ocupa el primer lugar en edición de e-books con 3.879 títulos, alrededor de un 30%, del total de los 13.069 que se publican.
Esta es la segunda publicación de cifras en el sector tras la entrada en vigor de la Ley 23/2011, según la cual el depositante principal de los títulos en el Depósito Legal de la Biblioteca Nacional es el editor, es decir, la estadística recoge las publicaciones editadas en España, independientemente de dónde hayan sido impresas.
Se confirma así a tendencia de decrecimiento del sector, que ya el año pasado acusó un retroceso del 6,2%, proporción que se suma a las cifras poco alentadoras de los últimos años. Tal como informó el Gremio de Editores, la actividad de negocio del sector editorial en España ha descendido en torno a un 20 % en los últimos tres años. Ya el año pasado, las editoriales calcularon un descenso de negocio de entre un 10 y un 11 %, al pasar la facturación de unos 2.800 millones de euros en España a unos 2.500 millones en 2012.
Ya en las cifras de 2010 el número de ejemplares vendidos alcanzó los 228.23 millones de libros (cifra total, incluyendo los dos semestres), un 3,4% menos que en 2009. En ese momento, la facturación total alcanzó los 2.890,80 millones de euros, luna caída del 7% frente a 2010.
Según los datos publicados Nielsen (la OJD de los libros) en 2012, el descenso total en ventas fue del 15%. Las cifras de Nielsen mostraban, además, que los libros más vendidos vendían la mitad que hace dos años. Si a eso se suman las tablas de la Confederación Española de Libreros (CEGAL), a la que aportan ventas casi 300 librerías, el dato a la baja en las librerías se ubicó entre 23 y el 30% menos.
El libro digital: un crecimiento lento y escaso
Los números de este primer semestre, en lo que a e-books se refieren, refuerzan la tendencia de un crecimiento lento y complejo. El mercado digital en España, en términos de negocio, se acerca al 3% de la facturación, cifra que podría disminuir –o al menos no crecer- debido a lo que los editores consideran una desventaja con respecto a los de países como Francia o Luxemburgo, donde aplican un IVA de entre el 3 y el 4 %, mientras que en España, el IVA del libro digital alcanza un 21%.
Este reclamo del sector en lo que a IVA se refiere tiene una reivindicación más agresiva en la lucha contra la piratería. La falta de mecanismos efectivos para la protección de la propiedad intelectual impide a los editores ganar alrededor de 300 millones de euros y debilita, según ellos mismos afirman, a un sector que da empleo directo e indirecto a más de 30.000 personas y representa el 0,7% del PIB.
