El rock en español no atraviesa su momento más vibrante. Contra eso luchan DA-CAT, un grupo que actúa con máscaras de animales y que destaca por unas letras que pocos se atreverían a firmar. “Pueblo elegido, qué divertido/ ser escogido para otro genocidio”, reza el estribillo de ‘Genocidio Deluxe’.También arremeten contra la degradación social. “Más de diez años en la capital/ el triple de caro, mitad de salario/ No puedes pagar el alquiler/expulsado de tu propio barrio”, denuncian en “Pijos Ahorcados!!!”, su canción más trepidante, que incluye también rimas como “Con los nuevos algoritmos/ siempre follamos con los mismos” o “Ser poeta es la nueva ETA”. Sangre fresca y desafiante para una escena que la necesita más que nunca.

Pregunta: Han dicho en algún lugar que “Si Public Enemy eran la CNN de la comunidad negra, DA-CAT son la banda sonora de los animales humanos”. ¿Somos cada vez más animales?

Respuesta: Lo hacemos todo al revés. Hay gente que trata a algunos animales, sobre todo a los perros, como a verdaderos seres humanos, pero esas mismas personas no dudan en tratar como cucarachas al resto de la gente. Somos infrahumanos.

P. Sus canciones tratan un asunto poco usual y tirando a incómodo en la música popular: el clasismo. ¿Les atraía romper un tabú?

R. Lo extraño es que no se hable más de ello. El clasismo, además, tiene un punto de crueldad gratuita que es único en el reino animal.

P. “Pijos ahorcados!!!”, su pieza más popular, habla contra los jóvenes de clase alta pero sobre todo contra la disolución de los vínculos sociales. “No ves a tus padres/ solo las series/ temporadas que nunca digieres”. ¿La modernidad consiste en vivir como algo emocionante el carecer de lazos humanos fuertes?

R. No creo que a nadie le guste vivir así. Si tuviésemos buenos sueldos y horarios, la mayor parte de los psicólogos tendrían un 70% menos de clientela. Esa emoción se crea desde la publicidad y los medios de comunicación que nos lo venden como si fuera la quintaesencia de lo cool y terminamos creyéndolo. La velocidad del mundo moderno no es el mejor ecosistema para tender lazos sólidos. Lo que sí es verdad es que entre pasar un fin de semana viendo a tus padres o mirando series, intenta escoger lo primero. Si te fijas, la gente siempre se arrepiente de las mismas cosas: “tendría que haber estado más tiempo con mis hijos…Tendría que haber pasado más días con mi abuelo…” Esa es la tragedia de los seres humanos, que pueden tropezar durante siglos con la misma piedra.

Para la mayoría del público escuchar música es como leer la revista ‘Pronto’ pero con coartada cultural

P.  ¿Qué se gana y qué se pierde como artista tocando tras una máscara?

R. Creo que somos el grupo que va más a pecho descubierto. El público es un gran cotilla y quiere artistas supuestamente sinceros no porque se sientan identificados sino por puro cotilleo. Para la mayoría del público escuchar música es como leer la revista ‘Pronto’ pero con coartada cultural. Por eso esperan cada canción de Zahara, Shakira, Adele o incluso Residente con ansia. Nosotros hacemos lo contrario, somos la separación perfecta entre artista y obra y, por tanto, podemos ser gilipollas sin que eso afecte a la gente. Recuerden siempre, amigos: no hay mayor mascarada que la autobiografía.

P.  ¿No hay miedo a que la letra de “Genocidio Deluxe” enfade al Mossad o a algún tarado extremista? 

R. Más bien tendría que ser al revés. El Mossad debería estar comiéndonos la polla porque mientras ellos estaban encantados consigo mismos por ser el servicio secreto más guay del mundo, nosotros, justo un mes antes del exterminio, ya sabíamos lo que iba a pasar y, por eso, anunciamos la salida de “Genocidio Deluxe”. Es más, incluso sorteamos unas vacaciones en Gaza, una idea, que luego nos copió con mucha menos gracia, el Gran Wyoming. Somos el puto oráculo. Y sí, hay mucho pirado suelto, la prueba es que nadie absolutamente nadie se ha atrevido a poner la canción, pero somos animales y estamos acostumbrados a esquivar cazadores.

P. La música de DA-CAT música me hace pensar en Manic Street Preachers, Tino Casal, Sigue Sigue Sputnik, Suicide y Lagartija Nick. ¿Son estos algunos de sus referentes? ¿Qué artistas inspiran más a la banda?

R. Nos gustan todos los que citas. Es un lujo aparecer asociados a esos nombres, sobre todo, por Tino Casal, que es el más político de todos. Nos gustan The Residents, Orville Peck, Sleaford Mods, Cazuuu. Y de aquí hay cosas muy chulas como Parquesvr, Natos y Waor, Tiraya y también dentro del pop nos gustan Grande Amore y Biznaga.

P.  Su hoja de promoción se posiciona contra “El pop-rock de dodotis, el indie de tendedero y el rock de cena de empresa”. ¿Pueden ponernos un ejemplo de banda de cada género y por qué les causan rechazo?

R. Indie de tendedero o, en estos casos, de botiguer es cualquier grupo que esté en el Primavera Sound, de estos que piensas que son mejores que Izal y luego no hay tanta diferencia. Pop-rock de tendedero es casi todo, la verdad, no sé, cualquiera que diga “hay que ser incómodo y molestar”, por ejemplo, ya no está molestando; y rock de cena de empresa… va desde todo lo que suena en el Viña Rock hasta grupos tipo Revolver o Los Secretos.

P. “El rock ha muerto”, dice un viejo tópico. ¿Hasta qué punto lo compran?

R. ¿Qué sería de los solos de guitarra de Bisbal o la escenografía de Dani Martín sin el rock? Hace poco, el mismísimo Alizzz dijo que le gustaría incorporar a sus directos la energía del rock, así que el rock más que vivir, parece que sobrevive injertado en otros géneros. Lo peor del rock no es el rock, que nos encanta también, sino los rockeros, este tipo de gente que ladra, pero nunca muerde. Lola Índigo tiene más agallas que todos juntos. “No hay pantalla, pues no toco”, a tomar por saco.

P.  ¿Cómo es un directo de DA-CAT?

R. No hemos hecho ninguno hasta la fecha, de momento, estamos refugiados en nuestras madrigueras, mientras todo el mundo hace sold out.

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