Estos discos, los conocidos Ibiza Mix, Caribe Mix, Disco Alegría y un largo etcétera tenían algo muy divertido, y era una picaresca descarada de cobrar versiones de canciones a precio de original.
Y es que cada álbum de los mencionados incluía tres, cuatro o cinco canciones originales y que pegaban fuerte en la pista de baile cantada por su intérprete de verdad; el resto, por el tema de no pagar derechos editoriales, se reducía a covers entonadas por cantantes de estudio, a los que se les ponía un nombre falso que recordase al original.
Estopa
De este modo, La raja de tu falda podía estar cantada por los hermanos Muñoz –Estopa-, pero también por Atope, tal como figuraba en los créditos de del Disco estrella volumen 3. Allí, el Mambo Numer 5 no era de Lou Bega, sino del curioso artista Luy Mambo, y Sueño su boca no era de Raúl, sino de otro artista que tenía un nombre de pila sin apellidos, Roberto. Roberto no fue el único Raúl fake, sino que también está Edu (curiosamente también sin apellidos) y que cantaba Prohibida en el Ibiza Mix de 2001.
Sonia y Selena
Sonia y Selena es el dúo que cantaba originalmente el hit Yo quiero bailar, aunque en algunos álbumes aparecía interpretada por las desconocidas Sandra y Serena -Disco Alegría- o Marla y María -Ibiza Mix-. ¿El público de las discotecas bailaría toda la noche igual con unas que con las otras?
Paulina Rubio
“Necesitamos un nombre similar a Paulina Rubio. ¿Qué se te ocurre?” pregunta un directivo de una importante discográfica a su equipo creativo. “¡Ya lo sé! ¡Paula Moreno!” responde el becario. Y así, el tema Yo sigo aquí fue cantado por Paula Moreno y no por la Rubio en el Disco Alegría de 2001. Siguiendo con la artista mexicana, en el Caribe Mix le dividieron el nombre, y por ello Vive el verano de la misma cantante lo cantó La Rubia. Pero en ese álbum no se conformaban con una Paulina low cost, sino que querían dos, y también incluían la citada canción Y yo sigo aquí, pero en tal ocasión era Paola quien afinaba eso de “tu química con mi piel hacen carga positiva”.
Sencillamente brillante eso de convertir a Paula Rubio en dos artistas independientes, Paola y La Rubia. Un fuerte aplauso al que se le ocurrió semejante brillantez y un silbido de “¡torero!” -canción de Chayanne, por cierto, que tuvo una réplica por Los chicos).
King África
No menos interesante es la forma en la que se bautizó al doble vocal de King África, que fue King Alegría, o el del eurovisivo David Civera, que ha tenido copias con nombres tan sonrojantes como D. Cereza. Este último nombre es casi tan ridículo como Papá Vicente, las Papá Levante de la casa Tempo Music que interpretaban la archiconocida tonadilla de “aunque parezca mentira, me pongo colorada cuando me miras”.
Las Ketchup
Un alarde de poca originalidad tuvo lugar con la canción Aserejé de Las Ketchup, que como no se les ocurría ningún nombre a los creativos del Disco Alegría 2002, fue interpretada por el grupo homónimo Aserejé. ¿Alguien se imagina el programa Noche de fiesta y a José Luis Moreno diciendo “y ahora os dejamos con tres chicas maravillosas, las Aserejé, que nos van a cantar su gran éxito Aserejé?”. Aunque tampoco sería tan descabellado; Camela o Ella baila sola tienen canciones llamadas como el propio grupo.
Melody
Melody, la cantante que quedó segunda en la última edición de Tu cara me suena y que ahora está grabando Pequeños gigantes en Telecinco, saltó a la fama con El baile del gorila, una canción que fue interpretada en el Ibiza Mix por Melosa.
Otros artistas
Eso sí, este universo paralelo de cantantes de imitación con nombres sustitutivos no era algo exclusivo de los discos veraniegos. En Puzzletron, por ejemplo, el Wannabe de las Spice Girls era interpretado por las Spider Woman, ahí es nada. O el Máquina Total, en el que la cantante Gala se convertía en Gaiya.