Tras diez años de trabajo y no pocos reveses, este jueves se ha presentado el Diccionario Biográfico electrónico (DB-e), al que se puede acceder de forma libre y gratuita para encontrar datos sobre más de 45.000 personajes fallecidos relevantes en la Historia de España, desde el siglo VII antes de Cristo hasta el siglo XX. Desde Alfonso X el Sabio hasta Francisco Franco, quien es reconocido como dictador y no como caudillo, apelativo que se le concedió en una primera versión de 2011 que hizo estallar la polémica.
El rey Felipe VI, junto a su consorte Letizia, han presidido el acto de presentación en el Palacio de El Pardo. En este proyecto participan unas 500 instituciones y 5.000 especialistas, quienes en colaboración con la real Academia de la Historia, se han encargado de reunir los perfiles biográficos de la historia de España. Con el desarrollo y la puesta en marcha de esta base de datos, se consolida una red de instituciones científicas nacionales e internacionales que sus responsables califican como "una obra de referencia para el conocimiento y estudio de la Historia de España".
El proyecto, que ha contado con el apoyo de Telefónica y de la Fundación Bancaria la Caixa, incluye personajes de los más diversos ámbitos, con especial atención a todos los territorios que, además de la Península, fueron parte de la Administración española, como la América virreinal, los territorios transpirenaicos, Cuba, Puerto Rico, Filipinas y el Milanesado.
La obra debería de estar accesible en Internet a partir de este jueves, según anunció la presidenta de la Academia de Historia, Carmen Iglesias. Sin embargo, la página ofrece aún algunos errores. De momento, está previsto que el proyecto ofrezca más de 2.000 descriptores que irán ampliándose según las nuevas incorporaciones. Uno de los rasgos que resaltan sus responsables es la vinculación de los personajes entre sí mediante un exhaustivo sistema de referencias directas e indirectas, que establecen entre ellos “una red de relaciones nunca antes mostrada”.
Franco, oficialmente dictador
Cuando en mayo de 2011 se presentaron los primeros 25 volúmenes delDiccionario Biográfico de la Real Academia de la Historia, saltó a la opinión pública la polémica. La colección incluía entre sus más de 5.000 biografías una dedicada a Francisco Franco.La entrada, escrita por Luis Suárez, catedrático medievalista vinculado a la Fundación Franco, era, según los especialistas, una visión laudatoria del militar y en ella se desvirtuaban no sólo los acontecimientos que provocaron la Guerra Civil sino también rasgos del gobierno de Franco: no se le calificaba como una dictadura.
En su momento, cuando se descubrieron los errores, el (entonces) presidente de la Academia, Gonzalo Anes ordenó la creación de una comisión que examinara qué otras inexactitudes de este tipo habían sido cometidas. La tarea de la Comisión terminó con un informe que sugería la realización de diez biografías complementarias entre las que estaría también la de Juan Negrín, quien sí aparece con el tratamiento de dictador.
La Comisión encargada de valorar el Diccionario Biográfico Español de la Real Academia de Historia presentó un informe y propuso la redacción complementaria de diez entradas, la revisión parcial de otras seis y matizaciones en una treintena relativas a políticos, militares y personajes de la jerarquía eclesiástica que se inscriben en los primeros 25 volúmenes (hasta la letra H) en los que han revisado 447 biografías.
Algunas frases de la biografía escrita por Luis Suárez generaron escozor. Al momento de hacerla, dijo su responsable Luis Suárez, que se había basado para su redacción un resumen de la propia biografía que él mismo publicó sobre Francisco Franco. A pesar de la petición de rectificación por parte del Ministerio de Educación, Suárez se negó a corregir una palabra de lo escrito y afirmó, sobre el particular: “No llamo a Franco dictador porque no lo fue”, dijo.