Con una pluma que combina maestría narrativa, humor negro y profundas reflexiones sobre la redención, Rob Hart (Nueva York, 1982) se ha consolidado como una de las voces más originales del thriller contemporáneo. En su más reciente obra, 'Asesinos anónimos', el periodista y autor de la serie de novelas policíacas de Ash McKenna, redefine el arquetipo del asesino a sueldo al presentarnos a Mark, un sicario letal conocido como "Caballo Pálido", que intenta dejar atrás su pasado sangriento. En una entrevista para Vozpópuli, Hart nos revela los secretos detrás de su creación, sus influencias y los retos de abordar una narrativa que humaniza a los monstruos y desmitifica la violencia.
Para Hart, la clave del éxito de 'Asesinos anónimos' radica en su enfoque auténtico. “Siempre empiezo desde un lugar de honestidad. Quiero abordar algo con lo que estoy luchando”, confiesa el autor. En esta ocasión, la pregunta que lo impulsó fue profunda: "¿Es posible cambiar y superar los errores del pasado?"
La respuesta no es sencilla, pero la exploración de este tema llevó a Hart a crear una historia que equilibra elementos aparentemente dispares: thriller, humor y una sincera búsqueda de redención. "Si empiezo por ahí, descubro que las piezas suelen encajar. Eso, y me aseguro de no aburrirme nunca al escribirlo. Si no me aburro yo, espero que el lector no se aburra”.
El complejo protagonista: un asesino con conciencia
Mark, el personaje principal, es un asesino temido que lucha por abandonar la violencia. Para Hart, construir un protagonista tan lleno de contradicciones fue un desafío fascinante. “Me encantan las películas de asesinos y, si lo piensas, muchas de ellas son iguales: un asesino famoso se retira, luego se ve obligado a abandonar su descanso y mata a cientos de personas. Me pregunté: ¿qué pasaría si eso no hubiera sucedido? ¿Qué pasaría si el personaje retirado ya no quisiera matar y se aferrara a eso?”.
Este enfoque le permitió darle a Mark una profundidad emocional rara vez vista en el género, convirtiéndolo en un antihéroe que se siente real. Según Hart, cada personaje que escribe refleja una parte de sí mismo: “Esta es una historia sobre mi lucha con mi propio pasado y mis propios errores. No sé lo que es quitarle la vida a alguien, pero sí sé lo que es tener profundos arrepentimientos y no querer que mis errores me definan”.
Redefiniendo la violencia: "Un asesino que no puede matar"
Uno de los aspectos más interesantes de 'Asesinos anónimos' es la premisa de un asesino reformado que no puede recurrir a la violencia para resolver sus problemas. "¡Lo más difícil fue escribir un libro sobre un asesino que no podía matar!”, admite Hart con humor. “Hay una regla en la escritura: mostrar, no contar. Y es difícil para mí mostrar lo letal que es si no puede ser letal”.
Para superar este obstáculo, Hart utilizó flashbacks estratégicos que revelan la destreza de Mark en su momento más álgido, mientras que, en el presente, planteó desafíos que el protagonista debía sortear sin comprometerse. “Cada vez que se enfrentaba a un obstáculo que habría sorteado fácilmente matando a alguien, tenía que preguntarme: "¿cómo va a salir de esto sin comprometerse?"".
Uno de los elementos más originales de la novela es el grupo de apoyo de doce pasos para asesinos en rehabilitación, una idea que surgió tras años de reflexión. “Inicialmente, pensé en hacer un grupo de terapia porque sería interesante contar con asesinos de diferentes partes del mundo. Pero luego se me ocurrió explorar la recuperación, porque en Alcohólicos Anónimos hay pasos y hay que hacer las paces. Todo eso hizo que la historia fuera más grande y presentó nuevos desafíos”.
Hart se tomó muy en serio la representación de este proceso. “Respetar el proceso de recuperación, que salva vidas, fue crucial. Tuve la suerte de contar con amigos en recuperación dispuestos a compartir sus historias conmigo y leer el manuscrito. Me alegra decir que creen que respeté el proceso”.
En cuanto al lugar donde se desarrollan los hechos, van desde Nueva York hasta Londres y Singapur. Los escenarios de 'Asesinos anónimos' son clave para dar vida a la trama. “Nací y crecí en Nueva York, así que muchas de las historias que escribo se desarrollan allí por defecto. Pero visité Singapur y me pareció un lugar increíblemente interesante, al igual que Londres. Me gusta escribir sobre los espacios en los que he estado, porque parece más realista”.
La psicología de la violencia y la redención
Hart aborda la violencia con una perspectiva única, basada en su experiencia personal con artes marciales como Krav Maga, boxeo y Muay Thai. “La violencia no es como en las películas. Es rápida, da miedo, es difícil y agotadora. Quería ahondar en su realidad: el coste para el cuerpo y para las personas que te rodean”.
Además, el autor encontró fascinantes las similitudes entre la estructura cerebral de los adictos y los asesinos, lo que enriqueció la exploración psicológica de Mark. "Había mucho que analizar. Quería mostrar cuánto afecta la violencia, no solo a la víctima, sino también al perpetrador”.
Hart reconoce que los antihéroes como Mark siguen cautivando al público porque exploran zonas grises de la moralidad. “El personaje del asesino es como el pistolero, el detective privado o el samurái. Trae justicia a un mundo injusto, normalmente fuera de los límites de la ley. Estos personajes permiten explorar esas zonas grises que son realmente interesantes”. Pero 'Asesinos anónimos' no es solo otro thriller. Hart cree que su contribución al género radica en su enfoque humano y realista: “Espero que esto contribuya a generar debates sobre las áreas grises morales”.
El éxito de 'Asesinos anónimos' ha llevado a Hart a desarrollar una continuación, 'El Protocolo Medusa', que explorará a otro miembro del grupo de apoyo. Aunque no quiso revelar muchos detalles, anticipó que el próximo libro se centrará en el viaje de un nuevo personaje y sus propios dilemas morales.
El legado de Rob Hart
Con 'Asesinos anónimos', Rob Hart regresa a sus raíces en el thriller, dejando atrás los elementos de ciencia ficción que marcaron obras como 'El almacén' y 'El hotel Paradox'. “Fue mucho más fácil escribir este libro. Para algo como 'The Paradox Hotel', pasé meses investigando teorías sobre viajes en el tiempo. Aquí, básicamente me senté y lo escribí”.
Para Hart, los antihéroes son la clave de su narrativa: “Me interesan mucho más los personajes que hacen lo que creen correcto y se mantienen fieles a sus convicciones. Nadie es completamente bueno. Los antihéroes son mucho más realistas”.
Al resumir el significado de 'Asesinos anónimos' en una frase, Hart no duda: “Trata sobre si es posible superar los errores que hemos cometido y convertirnos en mejores personas. Renunciar a la violencia tiene sus inconvenientes”. Una reflexión que, sin duda, resuena en cada página de esta adictiva novela.