Tras una docena de años desde que comenzaron en las localidades gallegas de Vigo y Nigrán, con el factor común de hacer rock, la agrupación “The Soul Jacket”, tras su primer álbum Wood Mama (2012) y varios concursos exitosos, mantienen una carrera con una evolución continua.
Ahora llegan con su nuevo disco de larga duración “Volume III”, en el que Jorge Mizer y Guillermo Gagliardi a las guitarras; Jann Zerega al bajo; Fender y Xabier Vieitez a las teclas; Mauro Comesaña a la batería; y Toño López como cantante, ofrecen rock sureño con raíces del soul y tintes latinos, que les confirman como una banda con sonido USA y raíces celtas y latinas de gran proyección.
Es Toño López el encargado de hablar con Efe para explicar su nuevo proyecto y la historia de un grupo que busca en la música la expresión de una forma de vivir.
¿Cómo ha evolucionado el sonido de la banda en más de una docena de años trabajando?
Con el tiempo nos hemos adentrado en sonidos más complejos, en la fusión de estilos. Nunca nos ha temblado el pulso a la hora de cambiar el rumbo en nuestros discos. Es algo que buscamos y se ha convertido, con el tiempo, en nuestra seña de identidad, por eso nuestro público siempre nos dice que cada trabajo y cada directo es diferente. Siempre buscamos ese factor sorpresa, no nos gusta repetir la misma formula una y otra vez.
MÚSICA CON MÚLTIPLES MATICES
No es fácil mantener un grupo numeroso durante tanto tiempo, ¿cuál es su secreto?
De los comienzos quedamos Mauro ( batería), Jann (bajo) y yo, a lo largo de estos años han pasado varios guitarristas, teclistas, coristas... Como bien dices, es muy complicado mantener una banda con los mismos miembros desde el principio, la vida y la situación de cada uno va cambiando y la banda te va pidiendo un ritmo de trabajo y unos tributos que no siempre puedes mantener, aunque tengas más o menos actividad hay que estar siempre ahí, primero está la banda y luego lo demás.
¿Qué atrajo a unos músicos gallegos por los ritmos con raíces americanas?
Desde siempre hemos escuchado música del otro lado del charco, tanto inglesa como estadounidense, nos atrae porque es una música rica en matices y fusiones de diferentes culturas, toda una paleta de colores que, a medida que vas descubriendo, te permiten dar más vida a tus creaciones. Un ejemplo es la música de Nueva Orleans con influencias del jazz, el blues, los ritmos afrolatinos, caribeños...
Con el tiempo nos hemos ido adentrando en sonidos e influencias diferentes, como el reggae y los ritmos afrolatinos, es como si los 'Creedence' hubieran fichado a Mongo Santamaría"
¿Se puede vivir solo de la música?
Vivir de la música es realmente complicado, no tienes una carga de trabajo estable, me refiero a que en verano, por ejemplo, se toca muchísimo y bien pagado, pero esto dura solo cuatro meses, el resto del año tocando en salas es complicado subsistir , más siendo una formación tan numerosa, los gastos se disparan.
¿Qué supuso “Wood Mama” en la historia de “The Soul Jacket”?
Con “Wood Mama” nos dimos a conocer, salimos a la luz, comenzamos a girar y a existir para los medios, nos dio la oportunidad de llegar a más gente. Casi todos los temas están compuestos por Alberto Gregorio que, tras la grabación del disco, dejó la banda, por lo que el comienzo no fue demasiado fácil ya que estábamos con disco nuevo bajo el brazo y sin guitarrista. Fué la época en la que Guillermo Gagliardi entró a formar parte de nuestras filas hasta hoy.
Neyl Young y Bob Dylan
¿Es decir que fue un trabajo bien relevante?
"Wood Mama" es nuestro trabajo de estilo más "clásico", rock&roll, blues y soul sin mucho más artificio, por eso mucha gente nos sigue diciendo que es nuestro mejor disco, porque creo que es el que más fácil escucha y también el más directo.
Se dice que suenan como los “Creedence Clearwater Revival” del siglo XXI? ¿Qué opinan?
Es un honor sin duda, los “Creedence Clearwater Revival” son una de nuestras bandas de cabecera, sin embargo creo que su influencia era más fuerte en los comienzos de "The Soul Jacket". Con el tiempo nos hemos ido adentrando en sonidos e influencias diferentes, como el reggae y los ritmos afrolatinos, es como si los “Creedence” hubieran fichado a Mongo Santamaría (risas).
En Volume III nos hemos acercado a los sonidos country-rock de Neil Young o Bob Dylan"
¿Ustedes han experimentado con el sonido negro en “Black Cotton Limited”, hacia donde se encaminan en la actualidad?
Esto es más patente aún en nuestro EP "Soul BBQ" .Como le decía, no nos gusta repetir la misma formula una y otra vez, así que tras experimentar con el soul, el funk o el afrobeat, en estos trabajos nos encaminamos hacia sonidos más de raíz, melodías más preciosistas, e intentamos depurar más el estilo, a veces hacer las cosas más sencillas es lo más complicado.
¿Cómo pueden definir su último trabajo “Volume III”?
Aunque suena a tópico, creo que este es nuestro mejor disco, es el más cuidado y completo en cuanto a composición de los temas, arreglos, incluso sonido, ya que hemos vuelto a grabar en Guitar Town con Hendrik Rover, pero la masterización del disco ha sido en Golden Mastering California, y eso se nota en el resultado final.
¿Es un sonido diferente?
Es nuestro disco con menos influencia de la música negra. En “Volumen III” nos hemos acercado a los sonidos country-rock de Neil Young o Bob Dylan... En "Green Cookies" o "Behind the Hill" la aparición del pedal steel, fiddel o el dobro, unido a melodías vocales cantadas al unísono, hacen que todo sea más patente, en la coctelera también hay blues psicodélicos y rock&roll, por supuesto, e incluso algún toque pop.
¿Cuál es el límite de la banda? ¿Hasta dónde quieren llegar?
Nos nos planteamos un límite. Nos gustaría dar un paso más allá, llegar a más gente dentro y fuera de nuestras fronteras, que los medios nos dieran más voz, esto es importante, porque creemos que nuestra música es popular, directa y honesta. Tan solo hace falta que nos den esa oportunidad.
Desde luego, una vez que se les escucha, no existe la menor duda de que merecen un amplio recorrido musical por calidad y fuerza.
