No estaba prevista la comparecencia de la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, quien se encontraba en Quebec. El lobby olímpico no le permitió asistir a la presentación de la Feria del Libro este martes 22 de mayo. Fernando Villalonga, Delegado de las Artes, tampoco tomó el testigo de Botella. Sus motivos eran más escurridizos y menos glamorosos.En su lugar asistió Timothy Chapman, Coordinador del Gobierno de las Artes, quien en su representación institucional mantuvo un mensaje similar al que ha dado Villalonga en estos días.
El Delegado de las Artes del Ayuntamiento de Madrid había tenido ya bastante este lunes, cuando adminitió a la prensa que lo que su gobierno destina en presupuesto a las bibliotecas de Madrid -365.000 euros-es "insuficiente", por no decir prácticamente inútil para "garantizar" su funcionamiento y correcta dotación.
Tal y como ha adelantado Vozpópuli, las bibliotecas son las instituciones más maltratadas -también es cierto que las menos glamorososas y las que menos retorno político tienen para Villalonga, Botella y compañía- en el presupuesto de Cultura del Ayuntamiento. En ese sentido, al ser consultado sobre cuál sería la hoja de ruta del Ayuntamiento ante las prioridades y carencias, Timothy Chapman respondió: "No son tiempos buenos para la cultura y vendrán peores".
