La multinacional Mercedes-Benz ha dado un espaldarazo a la planta de Vitoria en la que invertirá 1.000 millones de euros para iniciar una "nueva era" a partir de 2026, cuando empiece a producir las nuevas furgonetas eléctricas.
El acto de presentación de las obras de ampliación y adecuación de las instalaciones contó con la participación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del lehendakari, Íñigo Urkullu; además del director mundial de Mercedes Benz Vans, Mathias Geisen, y el director de la factoría alavesa, Bernd Krottmayer.
De esta manera las autoridades, tanto estatales como vascas, han querido mostrar su apoyo a la mayor empresa de Euskadi, que da empleo directo a cerca de 5.000 trabajadores e indirecto a 30.000 y que cuenta con 800 proveedores nacionales.
Urkullu ha animado a "seguir trabajando desde la confianza y la colaboración para asegurar el futuro de Mercedes Benz en Euskadi" y ha ofrecido el mismo "compromiso" que mostró en 2015 y 2022 cuando hubo momentos delicados en los que "se estaba decidiendo el futuro de Mercedes-Benz en Vitoria".
El setenta aniversario de Mercedes-Benz Vitoria es "el momento ideal para abrir una nueva era", ha proclamado Mathias Geisen, que ha destacado la importancia de la "flexibilidad" de factoría alavesa para adaptarse a las necesidades de la producción y del mercado.
Geisen, que ha expresado el deseo de Mercedes de "liderar" el mercado de los vehículos eléctricos, ha destacado la "gran cooperación" existente tanto con el Gobierno español como vasco, una colaboración que desea que continúe a futuro.
La planta de la marca de la estrella en Vitoria aporta el 5,2% del PIB de Euskadi (33,7% de Álava) y es responsable del 14,12% de exportaciones vascas (45,16% de las alavesas), según ha puesto en valor Bernd Krottmayer.
Adaptarse a la nueva era eléctrica
A su juicio, la inversión anunciada supone un "momento histórico" porque abre la puerta a "la fábrica del futuro", que será "eléctrica, digital y sostenible". La inversión, ha añadido, "asegura el futuro de la fábrica para muchos años".
En un encuentro previo con varios medios de comunicación, los directivos de Mercedes han confirmado dicha inversión para ampliar y adaptar Vitoria a la fabricación de las nuevas furgonetas eléctricas. Hasta ahora se había hablado de que la inversión rondaría los 1.200 millones, aunque serán finalmente mil millones.
Estas obras van a suponer que los más de 696.000 metros cuadrados de los que dispone ahora la planta se van convertir en unos 800.000 metros cuadrados: la mayor parte, casi 135.000, serán para montaje final y otros 120.000 para montaje bruto.
Estas obras, en marcha desde el año pasado, posibilitarán que Mercedes Benz pueda ensamblar a partir de 2026 y de manera simultánea la VS20 de combustión así como la nueva furgoneta de tamaño mediano VAN.EA (Van Electric Architecture).
Por el momento los directivos de la compañía no han desvelado cuándo se empezarán a comercializar los nuevos vehículos eléctricos producidos desde 2026 en Vitoria, ni el volumen de producción que esperan en un primer momento.
La división de furgonetas de Mercedes Benz cerró el año pasado con récord de 448.000 vehículos vendidos, un 8% más que el año anterior. Las ventas totales alcanzaron los 20.000 millones de euros y el ebitda los 3.000. En el caso de Vitoria hubo una producción de récord de 157.000 unidades.