En los últimos tiempos, la alimentación se ha convertido en uno de los factores más importantes a tener en cuenta. Y es que de ella no solo depende nuestra salud física, también la mental. Tras años dominados por la comida rápida y los ultraprocesados, expertos y organismos trabajan para concienciar sobre la importancia de incluir alimentos saludables en la dieta diaria.
Es necesario e imprescindible ofrecer al organismo los nutrientes necesarios para que goce de buena salud, con el fin de luchar y combatir contra enfermedades y agentes externos. Nutrientes esenciales que podemos encontrar en la gran variedad de alimentos saludables que recomiendan los expertos para llevar una dieta sana y equilibrada.
Alimentos saludables para comer todos los días
Algunos considerados casi milagrosos, estos son algunos de los alimentos saludables, ricos y vitaminas y minerales, que los expertos recomiendan incluir en nuestra dieta diaria:
- Avena: convertido en uno de los alimentos perfectos para un completo desayuno, la avena aporta hidratos de carbono de absorción lenta, fibra, proteínas, vitaminas del grupo B y minerales como el magnesio, el hierro, el cobre o el zinc. Este cereal ayuda a mantener el colesterol a raya y a combatir enfermedades del corazón.
- Huevos: aunque durante años ha habido diferentes opiniones sobre su consumo diario, los expertos señalan los beneficios que ofrece el huevo. Con un gran valor nutricional, tal y como confirma la Fundación Española de la Nutrición, aportan energía, proteínas, vitaminas del grupo D, A y B y minerales como el fósforo, el yodo y el selenio.
- Frutos secos: derribado el mito de que los frutos secos engordan, se han convertido en unos de los alimentos saludables más recomendados. A pesar de su gran aporte calórico, son ricos en grasas insaturadas, en fibra y en nutrientes necesarios como el hierro, el calcio, el ácido fólico, el potasio, el fósforo y las vitaminas E y B1, entre otros.
- Yogur: los lácteos son otros alimentos saludables que deberíamos incluir en nuestra dieta diaria. Los expertos recomiendan el consumo de yogur, con altos niveles de probióticos, beneficiosos para la salud digestiva y la flora intestinal.
- Aceite de oliva: considerado el rey de la cocina mediterránea, el aceite de oliva en imprescindible en nuestra dieta. Numerosos estudios avalan todos los beneficios del llamado oro líquido. Tal y como apunta la Fundación Española del Corazón, un estudio reciente de la Universidad de Córdoba demuestra que “el aceite de oliva protege contra la inflamación, el estrés oxidativo y el riesgo cardiovascular provocados por el envejecimiento”.
- Quinoa: convertida en un superalimento, la quinoa cuenta con interesantes valores nutricionales como su alto contenido en fibra, sus ácidos grasos omega 3 y 6, sus vitaminas A, B, C y E, y su aporte de hierro, potasio, zinc, fósforo y calcio. Además, es bajo en grasas, una buena fuente de proteínas y es apto para celiacos.
- Aguacate: convertido en uno de los alimentos saludables de moda al aguacate, rico en vitaminas y minerales y admirado por su alto contenido en grasas saludables, se le atribuyen numerosos beneficios. En entre ellos, que es eficaz contra el estreñimiento gracias a su fibra, controla los niveles de colesterol, es rico en potasio y ácido fólico, y aporta cantidades destacables de vitaminas E y C.
- Legumbres: lentejas, garbanzos o alubias son una excelente fuente de proteínas vegetales. Ricas en hierro y fibra, y bajas en grasa, las legumbres ayudan a controlar el azúcar en sangre y mejoran la salud intestinal y digestiva. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), “se recomienda el consumo de 3-4 raciones de legumbres semanales".
- Cereales integrales: los expertos recomiendan el consumo de los cereales en sus versiones integrales para beneficiarnos de todas sus propiedades. Son ricos en fibra y en importantes nutrientes como la vitamina V, el hierro, el potasio o el magnesio.
- Pescado azul: aunque la mayoría de los pescados cuentan con cualidades nutricionales, el pescado azul destaca por su riqueza en ácidos grasos omega 3, que, entre otras cosas, contribuyen a mantener los niveles de colesterol y a reducir las enfermedades cardiovasculares.
- Té verde: son de sobra conocidas las propiedades que los tés e infusiones de hierbas tienen para nuestro organismo. El té verde es uno de los más valorados y consumidos, gracias a sus beneficios relacionados con el envejecimiento celular, las enfermedades del corazón o la presión arterial.
- Jengibre: otro de los denominados superalimentos es el jengibre. Considerado un potente antiinflamatorio natural, también es un aliado contra los problemas digestivos, las inflamaciones de garganta, los dolores musculares y menstruales y es perfecto para acelerar el metabolismo y perder peso.
- Frutas: tal y como asegura la Organización Mundial de la Salud, las frutas son parte imprescindible de una alimentación saludable. De hecho, la OMS desvela que es recomendable consumir al menos cinco porciones de frutas y hortalizas al día.