La palabra amazake puede que no te suene demasiado, pero quédate con ese nombre si quieres cuidar tu sistema digestivo y tu salud general. El amazake es una bebida japonesa tradicional, con un sabor dulce y hecha a partir de arroz fermentado. Forma parte de la milenaria cocina japonesa junto al miso, la soja o el sake, y también es popular en otros países asiáticos como Tailandia, China o Malasia.
Amazake significa sake dulce y se logra fermentando arroz durante 24 horas para que no dé tiempo a que el alcohol salga a la luz. Esta bebida japonesa es muy rica en probióticos. Los probióticos son alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos destinados a mantener o mejorar las bacterias buenas (llamada microbiota normal) del organismo y actúan como nutrientes para la microbiota humana.
Este alto nivel en probióticos ayuda a nuestro organismo a regular el peso, por lo que es ideal incluirlo en una dieta en la que se busca adelgazar. Además su buen nivel de fibra facilita ese efecto de pérdida de peso y es saciante, por lo que puede ayudarnos a combatir el apetito entre comidas. Eso sí, no hay que abusar de él ni usarlo como base de nuestra alimentación diaria.
Es una bebida sana y nutritiva, ya que no contiene aditivos artificiales, ni conservantes, ni sal, ni azúcares. En Japón comenzó a ser consumida en el siglo III y la palabra aparece ya en el Nihon Shoki, el segundo libro más antiguo sobre la historia del país nipón. Tradicionalmente se consume en los yatai o puestos callejeros y en Año Nuevo es la bebida ofrecida en los santuarios sintoístas.
Beneficios del amazake
La cocina japonesa es milenaria y está fundamentada principalmente en la salud. En el caso del amazake, sus propiedades principales tienen que ver con el sistema digestivo, ya que es un probiótico excepcional. Entre sus múltiples beneficios, el amazake es muy fácil de digerir. Es un alimento fermentado, lo que significa que es como si estuvieras comiendo arroz predigerido, algo que facilita el movimiento en nuestros intestinos y evita las digestiones pesadas o la hinchazón abdominal.
Los polisacáridos y proteínas del arroz se encuentran en el amazake en formas más simples, como son la glucosa y los aminoácidos, que son más fáciles de digerir. Gracias a esta propiedad y a su gran aporte en fibra y oligosacáridos, el tránsito intestinal funciona mejor y se evita el estreñimiento.
Esto además facilita la absorción de nutrientes y vitaminas por parte de nuestro organismo. Entre las vitaminas que contiene esta bebida se encuentran las vitaminas B1, B2 y B6, que colaboran en la síntesis de ácidos grasos e interviene en el metabolismo de los hidratos de carbono. A esto hay que añadir que contiene aminoácidos, que junto con las proteínas son fundamentales para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
También contiene ácido pantoténico (que ayuda a convertir los alimentos que consumimos en la energía que necesitamos. Es importante para muchas funciones en el organismo, especialmente la fabricación y descomposición de las grasas) y biotina (una vitamina que se encuentra en alimentos como huevos, leche y plátanos. La deficiencia de biotina puede causar pérdida y debilidad del cabello y sarpullido en la cara), que tienen un gran aporte energético, lo que hará estar más activo a lo largo de todo el día.
Sustituto del azúcar
Por su sabor dulce, el amazake puede sustituir al azúcar en postres y bowls de frutas. Lo puedes añadir por ejemplo a tu desayuno a modo de yogur, para que sea más sabroso y saludable. Igualmente es perfecto en platos agridulces, ya que no es un dulzor excesivo pero sí muy agradable al paladar.
Cómo tomar amazake
Esta bebida, a la que se conoce como yogur japonés, puede incluirse en nuestra dieta diaria de una manera muy variada, ya que es muy versátil. Lo puedes tomar como postre (como si fuera un arroz con leche o en helados, bizcochos o yogures), como snack saludable y hasta como aliño en ensaladas o platos fríos. Incluso lo puedes tomar caliente o en batidos como sustituto de la leche y con frutas frescas que le darán un toque delicioso y muy nutritivo.
La forma de prepararlo es mezclando el amazake con agua y llevándolo a hervir. Le puedes añadir un toquecito de jengibre rallado para darle un sabor más potente (de hecho así es como se sirve en las tradicionales casas de té japonesas o en los puestos callejeros que se ponen en ferias o festivales en el país del sol naciente). Ahora lo venden allí incluso como bebida instantánea envasada que se puede llevar a cualquier sitio.
La receta tradicional de amasake lleva haciéndose de la misma manera desde hace cientos de años. Aunque puedes encontrarlo ya listo para tomar en tiendas especializadas en nutrición o en tiendas de productos japoneses, en casa se puede elaborar y no es difícil.
Se necesita arroz integral y fermento koji. El koji es arroz blanco (kome) o integral (genmai), que se le ha cultivado un hongo denominado koji-kin, que es el responsable de generar enzimas responsables de la digestión de las moléculas complejas que se encuentran en el arroz y la soja en moléculas más simples.
Lo puedes encontrar en tiendas especializadas. Hay que dejar el arroz en remojo una noche y luego cocerlo en un recipiente que no sea metálico. Añadimos el fermento koji y lo revolvemos con una cuchara de madera. A partir de este momento comienza la fermentación así que hay que cubrirlo con un paño y dejarlo reposar a temperatura ambiente. Pasadas 24 horas, la mezcla será más compacta y homogénea y su olor dulce.
No hay que pasarse de las horas marcadas, puesto que a partir de ahí sale el alcohol. Para detener la fermentación se hierve de nuevo. Se puede tomar así o pasarlo por un pasapuré para que no se noten los grumos.
