En España ya hay casi 3 millones de diabéticos según informa la International Diabetes Federation (IDF). Esto hace que muchas personas tenga que combatir diariamente esta enfermedad en España. Controlar los niveles de azúcar en sangre y mantenerlos a raya, es una de las tareas cotidianas que llevan de cabeza a diario a las personas que sufren esta enfermedad.
Existe una hormona que es fundamental para los diabéticos y su importancia es vital para que se produzca un equilibrio en el nivel de azúcar en sangre. Además de la hormona de insulina, hay otra como es el glucagón, conocida como la "hormona de la dulzura", que son ambas dos vitales para mantener una cantidad adecuada de glucosa en sangre. Al actuar de forma coordinada, son esenciales para las personas diabéticas.
Así, lo explican desde Magazine Soluciones para la Diabetes: "Si nuestro organismo funciona de forma normal, el glucagón y la insulina trabajan de forma coordinada para regularse. Si la insulina inhibe la secreción de glucagón, el glucagón activa la síntesis de insulina, y así se consigue el necesario equilibrio".
¿Qué es el glucagón y por qué es importante para los diabéticos?
"El glucagón tiene un efecto antagónico al de la insulina, aumentando los niveles de glucosa en sangre", así explican desde Soluciones para la Diabetes. Una hormona "peptídica" que se produce en el páncreas. Hay situaciones en las que el cuerpo demanda más azúcar, es ahí cuando el páncreas genera glucagón y "libera para que llegue a las células".
" Si una persona con diabetes insulinodependiente se inyecta insulina para reducir o mantener estable el nivel de glucosa, administrar glucagón solo puede servir para aumentar estos niveles."
Así, de esta forma un diabético puede hacer una idea para que puede servir administrarse glucagón: para todo lo contrario que la insulina, para subir los niveles de azúcar en sangre.
¿Cuándo inyectar glucagón?
En episodios de hipoglucemias leves donde se produce bajadas de azúcar en sangre, es suficiente con comer alimentos que sean ricos en hidratos de carbono de absorción rápida. Sin embargo, cuando hablamos de una hipoglucemia grave (con síntomas de alteración de conciencia) donde se dificulta ingerir alimentos o incluiso, no es suficiente comiendo, se puede proceder a inyectar glucagón para aumentar de forma drástica el nivel de azúcar en sangre en el cuerpo.
Según informan desde Magazine Soluciones para la Diabetes el glucagón se administra igual que la insulina, esto es por vía subcutánea "pero también puede hacerse vía intramuscular como cualquier otra inyección". "Si tras la inyección la persona afectada no recuperase la consciencia, se podría repetir el proceso sin temor alguno", explican.
De esta forma, en el caso de sufrir un eposodio grave de hipoglucemia, lo más recomendable es consultar con un profesional médico o el especialista en diabetes para que pueda trazar una asistencia médica específica en estas situaciones que pueden poner en riesgo la salud de las personas que sufren de diabetes.