Un equipo internacional de astrónomos ha anunciado hoy el descubrimiento de una molécula poco común, la fosfina, en las nubes de Venus.
El equipo internacional, que incluye a investigadores del Reino Unido, Estados Unidos y Japón estima que la fosfina existe en las nubes de Venus en una concentración muy pequeña, sólo una veintena de moléculas por cada mil millones.
Según el equipo, para crear la cantidad observada de fosfina en Venus, los organismos terrestres sólo tendrían que trabajar, aproximadamente, al 10% de su productividad máxima. Se sabe que las bacterias de la tierra producen fosfina.
¿Qué es la fosfina?
- La fosfina o fosfano (PH3) es un gas incoloro, inflamable, tóxico e inodoro en estado puro, aunque a menudo huele a ajo o pescado podrido cuando se presenta junto a otros compuestos similares, según la Agencia SINC.
- Su presencia en la tierra se puede hallar en ciénagas o en las heces.
- Contados microorganismos anaerobios producen fosfina, aunque también se produce de manera artificial en procesos industriales como en la fabricación de semiconductores para introducir fósforo en los cristales de silicio.
- Al ser tóxico, también su empleo ha sido destinado a la producción de insecticidas y raticidas.
- La fabricación de metanfetamina también origina este gas.
¿Por qué es un indicio de vida?
El PH3 se ha propuesto como una biofirma cuya detección podría indicar la existencia potencial de alguna forma de vida en estos planetas ya que se ha detectado su presencia en rocas cubiertas de excrementos de pingüinos, en aguas fecales y en los intestinos de animales.
Sin embargo, por normal general, la fosfina se asocia con la presencia de microbios que viven en entornos donde la presencia del oxígeno es nula.
Tras sus observaciones, realizaron cálculos para ver si estas cantidades podían provenir de procesos naturales no biológicos en el planeta y se descubrió que estas fuentes no biológicas producían como máximo una diezmilésima parte de la cantidad de fosfina que veían los telescopios.
