Porsche ha renovado profundamente el Panamera, estrenando en la nueva gama por primera vez una versión híbrida enchufable que, con 416 CV de potencia, homologa un consumo medio de 3,1 l/100 km, una reducción superior al 50 por ciento frente al anterior modelo.  El sistema de propulsión híbrido estrena tanto una nueva batería de mayor rendimiento —que puede además recargarse ahora también directamente en la red eléctrica convencional en unas cuatro horas— como un nuevo motor V6 Biturbo de 3 litros de cilindrada. Así, el motor eléctrico llega ahora a los 95 CV de potencia, más del doble que el anterior, mientras que el motor de gasolina aporta 333 CV. Entre ambos, 416 CV para disfrutar de unas prestaciones de vértigo, 5,5 segundos en pasar de 0 a 100 km/h y una velocidad máxima que llega hasta los 270 km/h.

Eso sí, sus consumos le sitúan como el Panamera más comedido, algo que han comprobado un grupo de más de 40 periodistas que han sumado casi 1.200 kilómetros de recorrido entre todos a lo largo de un circuito de unos 30 kilómetros que combinaba ciudad, carretera y autopista sin límite de velocidad, y en la que el Panamera ha podido llegar a circular brevemente por encima de los 230 km/h.

Al finalizar la prueba, la media lograda entre todos los probadores quedó en unos ajustados 4,4 l/100 km, siendo el más bajo de todos los valores logrados de 2,8 l/100 km. Una demostración de las posibilidades que ofrece el nuevo Panamera híbrido que, en condiciones más o menos óptimas de conducción, puede llegar a ofrecer valores sin duda impropios de un turismo de más de 400 CV de potencia.

Y es que con el nuevo motor eléctrico y la batería de mayor rendimiento, el Panamera S E-Hybrid puede llegar a recorrer hasta 36 kilómetros en modo completamente eléctrico alcanzando además 135 km/h de velocidad máxima. Además de este modo eléctrico denominado «E-Mode», el sistema contempla otros tres programas.

En el normal, los dos motores trabajan conjuntamente y la gestión trata de mantener la carga de la batería más o menos constante. En el modo «Sport», ambos motores funcionan conjuntamente buscando una respuesta lo más dinámica posible, mientras que el último de ellos, el «E-Charge», se encarga de permitir recargar la batería con la energía del motor de gasolina.

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