Cerrado previo pago de los 40 millones de su cláusula el traspaso de Javi Martínez al Bayern de Múnich y con la salida de Fernando Llorente bloqueada al no aceptar el Athletic la última oferta que le hizo la Juve, el club que preside Josu Urrutia se encuentra en una complicada tesitura: reforzar o no su plantilla a golpe de talonario.
Según Marcelo Bielsa, "no hay proyecto de Primera que no se vería debilitado si pierde dos jugadores de su nivel", en referencia a Javi Martínez y Llorente. El técnico de Rosario dice tener "la ilusión de que San José y Gurpegui jueguen como Javi y que entre Aduriz, Toquero e Ibai marquen los goles que marcó Fernando", pero todo apunta a que el Athletic invertirá en fichajes al menos parte de los 40 millones ingresados por el pago de la centrocampista navarro.
El hecho de que el Bayern haya pagado la cláusula después del 15 agosto permite al Athletic disponer de más tiempo para fichar. Esta normativa quedó instaurada a raíz de que el Barça pagara la cláusula de Rivaldo el último día del mercado en 1997. Los nombres que se barajan para invertir una parte o el total de los 40 millones ingresados por la salida de Javi Martínez son conocidos. Desde el bético Beñat, a los realistas Iñigo Martínez y Antoine Griezmann, pasando por el centrocampista del Granada, Mikel Rico, el lateral izquierdo del Málaga, Monreal, y el 'todocampista' del Atlético de Madrid, Raúl García.
En el caso de los jugadores de la Real Sociedad, el francés Griezmann siempre ha sido uno de los jugadores favoritos de Bielsa, si bien Iñigo Martínez podría cubrir la baja de Javi Martínez en defensa. Ambos, al igual que otro jugador que también ha sonado -el riojano Rubén Pardo- tienen una cláusula de rescisión de 30 millones, a la cual no dudaría en remitir Jokin Aperribay, presidente del club donostiarra. Además, los tres futbolistas citados han declarado estos días estar muy a gusto en la Real y que no hacen caso a los rumores.
El otro jugador que más agrada a Bielsa es Mikel Rico, un ex del Athletic que en 2001 abandonó Lezama, en donde sólo pudo llegar a juveniles y disputar un partido con el Basconia. Llegó al Granada procedente del Huesca en 2010 por 600.000 euros. Su cláusula de rescisión es de once millones, aunque hace unos meses su fichaje estaba tasado en Ibaigane en dos, mientras que el club que preside Quique Pina no bajaba de los 4.
En cuanto a Beñat, a quien le encantaría regresar al Athletic, la Junta del Betis lo tiene claro: si Josu Urrutia lo quiere, tendrá que abonar su cláusula de 20 millones. La mismo cantidad figura en la libertad de Monreal, aunque en el caso del lateral internacional, el Málaga sí podría negociar dada su delicada situación económica. El problema en todos los casos, es que los clubes de origen sabrán lo que el Athletic ha ingresado por Javi Martínez, Fernando Llorente o ambos.
Raúl García, el centrocampista que tan buena temporada hizo la temporada pasada en su regreso a Osasuna, es otra opción. El navarro ha vuelto a la disciplina del Atlético, aunque parece no entrar entre los preferidos de Simeone. Su cláusula de rescisión es de 25 millones, pero negociables.
En total, los jugadores que podrían interesar al Athletic suman 136 millones de euros, sin incluir al realista Rubén Pardo (30), cantidad a la que habría que sumar el IRPF correspondiente y, lo más importante, el interés del futbolista por vestirse de rojiblanco.