Devis Licciardi, atleta de 28 años, fue descubierto cuando trataba de burlar un control antidopaje después de participar en el Campeonato de Italia en la prueba de 10 kilómetros. A la hora de pasar el control el corredor utilizó un pene de plástico con el que trató de rellenar el tubo de orina, según publica la web italiana TG.com24.
El atleta italiano, miembro de la selección transalpina en la especialidad de 3.000 metros, participó el pasado fin de semana en el campeonato nacional. Al finalizar la carrera Devis Liciardi fue sorprendido cuando trataba de burlar el control con un pene falso lleno de orina 'limpia' que llevaba en sus calzoncillos.
Los jueces estaban sobre aviso, toda vez que el Comité Olímpico Italiano (CONI) sospechaba hace tiempo que Licciardi utilizaba sustancias prohibidas. Evidentemente, el CONI ha abierto una investigación sobre lo ocurrido tras la carrera disputada en Molfetta (Bari), al sur de Italia.
Este peculiar método tramposo no es nuevo. Su uso se conoció en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, cuando fueron cazados dos medallistas de oro húngaros: el lanzador de disco Robert Fazekas y el de martillo Adrian Annus.
Ya entonces el artilugio se podía obtener por Internet. Consiste en un pene de plástico, una cánula, un esparadrapo y una ampolla de orina limpia. El pene falso se fija bajo el esparadrapo, que, a su vez, se ajusta al calzoncillo. Del órgano masculino artificial sale un tubo que se introduce en el ano. Allí, en su interior, se oculta una vejiga artificial con la orina impoluta. El atleta sólo tiene que apretar un gatillo minúsculo para miccionar de forma 'natural'. Pero, a veces, como le sucedió a Licciardi, te pillan.