Vale que Fernando Alonso, en su papel de hombre de equipo, siga viendo el vaso medio lleno desde esa pose zen que ha adoptado desde su regreso a McLaren. Pero de ahí a soportar que Yusuke Hasegawa, jefe de Honda, saque pecho, va un mundo.
"Fernando hizo una grandiosa carrera y el equipo ha hecho un gran trabajo para hacerle terminar séptimo, ¡y en Spa!", declaró entusiasmado Hasegawa. "Esto confirma que nuestra unidad de potencia ha dado un paso hacia delante y estoy contento y agradecido a todos los que han trabajado duro", añadió sin ponerse ni colorado.
Es lo de siempre. Nadie duda de que Honda progresa, pero lo hace de forma tan lenta que es desesperante para los aficionados. Y el problema es que los demás también lo hacen y, sobre todo, el futuro de McLaren y de Alonso depende de hasta dónde será capaz de acercarse la marca nipona a los líderes de aquí a marzo de 2017.
"Seguimos con ganas y no estamos totalmente satisfechos con este resultado, pero después de cada carrera nos volvemos a casa orgullosos de nuestro progreso y esta vez no será diferente. La siguiente cita es en Monza, que posiblemente sea el fin de semana más duro para nosotros, pero nos prepararemos para darlo todo como siempre", concluyó el directivo nipón. Discurso habitual con humo, mucho humo.
Como siempre, mucho más realista, sin alarmismo ni tensiones, fue el piloto asturiano, que se mostró contento por el resultado logrado en un Gran Premio de Bélgica en el que "todo ha ido a favor" para lograr la séptima posición tras partir desde la última plaza de la parrilla de salida.
"Es difícil siempre comparar años, seguramente he tenido buenas actuaciones aquí, sólo que no daban el resultado que esperábamos, pero esta vez ha ido bien y toda la mala suerte que hemos tenido en el fin de semana se ha concentrado en buena", señaló Alonso en declaraciones ante los medios.
El asturiano celebró haber evitado "todos los accidentes" y haber tenido "suerte con la bandera roja" tras el accidente de Kevin Magnussen (Renault) y el hecho de poder poner así "las ruedas nuevas en el 'pit lane'". "Todo ha ido a favor hoy y salir el 22 y acabar el 7 es una buena noticia para nosotros", añadió.
Con este resultado, McLaren se coloca por delante de Toro Rosso en la clasificación pero para el ovetense se mantiene aún "demasiado lejos" del resto de constructores. "Luchar con Williams y poder defendernos de tú a tú es una novedad en un circuito muy desfavorable, y estar el sábado entre los diez primeros en la crono con Jenson (Button) y hoy en puntos es buena señal para el equipo", indicó.
"Williams y Force India están demasiado lejos, hemos sumado 30 puntos en 12 ó 13 carreras por lo que es difícil sumar más de 40 en lo que queda. Intentaremos hacerlo bien y asegurar que hemos adelantado a Toro Rosso", subrayó Alonso.
El bicampeón del mundo afirmó estar "contento" con el desarrollo del Gran Premio "a pesar de todos los cambios" realizados en su monoplaza y por los cuales fue sancionado a salir desde la última posición de la parrilla de salida. "Sigue la línea ascendente en cuanto a prestaciones y en las carreras nos divertimos, que es buena señal", apuntó.
El piloto español estaba acompañado en la última fila por el británico Lewis Hamilton, que partía penúltimo y acabó en tercer lugar. "Salí más o menos bien, luego vi que Hamilton se iba por el exterior y me fui por el interior por llevar la contraria y me salió muy bien la jugada", comentó en tono bromista.
"Hubo varios toques y con el 'virtual safety car' y el 'safety car', las paradas de todo el mundo que había salido con gomas superblandas y la bandera roja nos encontramos en cuarta posición. Intenté tirar al máximo, pero era difícil controlar a Hamilton, 'Checo' (Pérez) y Vettel", añadió.
Alonso vivió además un incidente con el alemán Nico Hulkenberg (Force India) en la recta final de la salida del 'pit lane' donde ambos coches se tocaron debido al poco espacio que había en dicho tramo del circuito.
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"Fue muy apretada, le dejé espacio para no recibir una penalización por 'unsafe release' pero en la curva no cabíamos los dos y tuve que levantar yo un poco. Tampoco le hubiese podido mantener detrás así que era mejor que tirase", sentenció.