Raikkonen tuvo el domingo un encontronazo por radio con Lotus, su actual equipo, por no dejar pasar a su compañero Grosjean. No es la primera vez que ocurre, toda vez que al finlandés le gusta pilotar sin recibir ni dar demasiadas explicaciones.
Los jueves de gran premio es día de ruedas de prensa y entrevistas con los medios de comunicación. Y no es la primera vez que Raikkonen no se presenta, pero lo sucedido en India y el hecho de que se haya hecho público su fichaje por Ferrari desataron todo tipo de especulaciones en el circuito de Yas Marina.
En principio, conociendo al personaje, periodistas y aficionados relacionados con la Fórmula 1 crearon un tema (hashtag) en Twitter #whereiskimi (¿dónde está Kimi?) que fue creciendo en popularidad y objeto de numerosos comentarios jocosos sobre las posibles cosas que podía estar haciendo el finlandés.
Lo menos gracioso de la cuestión es comprobar lo que ya era conocido: la peculiar forma de ser de Raikkonen. Porque el año que viene el finlandés será compañero de Fernando Alonso en Ferrari, y al español no le hará ninguna gracia cumplir a rajatabla con sus obligaciones dentro y fuera del coche mientras Kimi sólo se vuelca de verdad a la hora de pilotar.
¿Correrá lo que queda de Mundial?
Las especulaciones con la ausencia de Raikkonen llegaron a tal punto que algunos han llegado a temer que el finlandés se niegue incluso a subirse al Lotus en Abu Dabi. Porque, aparte de las broncas y su fichaje por Ferrari, lo de verdad grave es que a Kimi le deben dinero.
Por eso retrasó al límite su vuelo desde Europa -cuando la mayoría de pilotos viajaron directamente desde India- y en el equipo dudan incluso que, con tan poco tiempo para aclimatarse, esté en condiciones óptimas para afrontar la carrera.
