La sede de la escudería de Fórmula 1 de Red Bull, en Milton Keynes (Inglaterra), sufrió la madrugada de este sábado un asalto a consecuencia del cual los atracadores se llevaron más de 60 trofeos conseguidos por el equipo en la máxima competición automovilística, aunque la mayoría eran réplicas.
La policía de Thames Valley recibió una llamada a las 1,30 horas de la madrugada como consecuencia de un robo que se había efectuado en la fábrica de Red Bull Racing en la localidad británica de Milton Keynes.
Al parecer un grupo de seis hombres se introdujo en el recinto automovilístico con dos coches, un 4x4 de color plata y un Mercedes familiar de color oscuro, ambos, al parecer, con matrículas extranjeras.
Aunque no hay ninguna descripción de los delincuentes se cree que todos eran hombres y que vestían ropa oscura. No hubo que lamentar ningún daño personal en el personal de vigilancia de las instalaciones, pero más de 60 trofeos de la escudería fueron sustraídos.
Christian Horner, jefe del equipo, confirmó que "el valor material de los trofeos robados es escaso, máxime teniendo en cuenta que la mayoría eran réplicas, pero el daño moral es enorme, porque es el fruto de muchos años de trabajo en la Fórmula Uno".
"Este acto hará que nos replanteemos alguna cosas en nuestra fábrica y tendremos que hacer la sede menos accesible para los aficionados, lo que será injusto porque cientos de aficionados viajan a nuestra fábrica cada año para ver nuestros trofeos y nuestros coches de Fórmula Uno", añadió Horner.