Cuando todo hacía indicar que el Barcelona había llegado a un acuerdo con el Santos y que Neymar se convertiría este sábado en nuevo jugador azulgrana, la operación volvió a detenerse en seco.
Con otra oferta, en teoría del Real Madrid, sobre la mesa, Neymar aplazó la elección del club en el que jugará la próxima temporada, por lo que el culebrón de su partida, con muchas idas y vueltas en los últimos días, se prolongará por un tiempo más.
"Voy a decidir con mi familia, pues no tengo prisa y la decisión puede salir en 5 minutos, en media hora o en tres días", declaró Neymar a periodistas que lo esperaban en el estadio Vila Belmiro, del puerto paulista de Santos, en la madrugada de este sábado.
En términos parecidos se pronunció el padre del jugador a la salida de la reunión. "No podemos tomar una decisión en caliente. Vamos a ir para casa y ver qué es lo que quiere Neymar", concluyó.
En una nota oficial, el Santos divulgó que "en una reunión con los representantes del Comité de Gestión del club, Neymar Júnior recibió las propuestas recibidas y debe analizarlas en los próximos días, antes de tomar una decisión definitiva".
Neymar, acompañado por su padre y por el empresario Wágner Ribeiro, llegó después de la medianoche al estadio Vila Belmiro para encontrarse con los directivos del Santos, que hasta minutos antes habían sostenido una reunión de casi ocho horas con representantes del Barcelona para ultimar el fichaje del atacante.
El Santos, en medio de la reunión, aceptó dos propuestas para negociar el traspaso, sin divulgar el nombre de los equipos, y dejó en manos del jugador la decisión. No obstante, después de la reunión, el vicepresidente del Santos, Odilio Rodrigues, confirmó que la primera oferta, en efecto, era del Barcelona, y la segunda del otro grande español, el Real Madrid.