En su edición de esta semana, la revista 'France Football' publica un informe en el que destapa un posible pacto para que Qatar ganara la votación a organizar el Mundial de fútbol de 2022. En diciembre de 2010, la candidatura qatarí se impuso por sorpresa a las de Australia, Corea del Sur, Estados Unidos y Japón. Las sospechas de corrupción en torno a esta polémica elección vuelven a recaer sobre los miembros del ejecutivo de la FIFA.
Jack Warner, ex vicepresidente de la FIFA indicó que cuatro miembros del comité podrían haber recibido un total de 20 millones de dólares a cambio de su voto. Michel Platini reconoció haber votado a Qatar: "Voté a Qatar porque es hora de que se haga una Copa del Mundo en esta parte del mundo, se presentaron a 5 elecciones anteriores", pero se mostró partidario de de disputar la competición en invierno y no en verano, a causa de las altas temperaturas.
Otro dato que hace levantar sospechas es que la organización qatarí presentó al Estadio Nacional de Lusail como sede del partido inaugural del Mundial, antes de que se hiciera oficial el nombre del país organizador, alimentando así los rumores sobre la votación fraudulenta.