"Ante Holanda hicimos un primer buen tiempo y un segundo desastroso. Nos fuimos desarmando, pero no es cuestión de ganas, esto es fútbol. Tenemos que reaccionar", añadió Del Bosque, sin despejar las dudas sobre una posible suplencia de Casillas, cuando todo hacía (y hace) indicar que el portero del Real Madrid es uno de los seguros a pesar de su desastrosa actuación ante Holanda.
Del Bosque no confirmó la titularidad de Casillas ante Chile, aunque nadie duda que jugará a pesar de su mal partido ante Holanda
Insistido en si habrá muchos cambios ante Chile, Del Bosque quiso dejar claro que "si los hay no estamos señalando a nadie. Buscaremos lo que creamos que es lo mejor para la selección. Nadie debe alarmarse de los cambios que hagamos, todos tienen nuestro afecto. Por encima de esa estima está el equipo. Podría haber dos o tres cambios. Estamos en la situación que estamos y esa es la que tenemos que manejar. Somos flexibles, pero también vamos a mantener algunas cosas", dijo el seleccionador.
La ausencia de Víctor Valdés impide abrir el debate, aún más con De Gea lesionado y Pepe Reina con un claro complejo de suplente
El todavía guardameta de la Real Sociedad y capitán de la selección de Chile, Claudio Bravo, explicaba en una entrevista con el diario El País lo que significa para un portero jugar dos veces al mes, como ha hecho Casillas este año. "Es una situación muy difícil. Y más en el Madrid, que juega cosas muy importantes. El portero necesita competir, necesita sentirse vivo semana a semana. Muchas veces cuando pierdes la continuidad tratas de hacer lo justo, no cometer errores, no hacer grandes cosas por miedo a que te puedan pasar cosas (...) A Casillas lo engrandece lo bien que ha llevado este tema".
Claudio Bravo, guardameta de la Real y capitán de Chile, cree que "la situación de Iker era muy difícil, y más en el Real Madrid"
Preguntado sobre sobre qué es lo que se pierde cuando un portero no compite con frecuencia, Bravo explica que "los movimientos, la coordinación con tu defensa, los balones aéreos son muy difíciles porque los puedes entrenar toda la semana, pero cuando llega el partido y tienes los rivales enfrente y tienes gente que se mueve la verdad que todo es distinto. Cuando dejas de jugar y te pones ahí con los ‘muñecos’ descubres que todo es totalmente distinto y tienes que habituarte, tratando de que la cabeza funcione de otra manera, haciendo trampas para que la cabeza se habitúe como si siguieras compitiendo semana a semana sin que sea realmente así".
Como lo del huevo y la gallina, en el caso de de Casillas la pregunta es qué fue antes: si su cuestionado y cuestionable estado de forma llevó a Mourinho a sentarle o fue a raíz de que el técnico portugués le relegara a la suplencia de Adán cuando Iker empezó a perder la confianza y a bajar su rendimiento.
Quienes disculpan a Casillas por no haber tenido jugado la Liga son los mismos que destacaron sus actuaciones en la Copa y la Champions
Quienes defienden que Casillas pagó ante Holanda la falta de partidos son los mismos que elogiaron y destacaron el hecho de que, causal o casualmente, el Real Madrid ganara esta temporada los dos títulos que disputó Iker (Copa y Champions) o, si se prefiere, perdió el único que jugó Diego López (Liga). Es decir, ese argumento no vale.
La fe ciega de Del Bosque es inversamente proporcional a las ganas que Mourinho tenía de sentar al portero y capitán del Real Madrid
La cuestión es que si Casillas no está bien, y es evidente que no lo está, quizás Del Bosque debería haberse planteado seriamente su titularidad. De haber estado Víctor Valdés, a quien una grave lesión de rodilla le ha dejado sin Mundial y, de momento, sin equipo, parece que este debate hubiera sido mucho más profundo. La fe ciega de Del Bosque en Casillas es inversamente proporcional a las ganas que Mourinho le tenía a Iker. Y así volvemos a la misma pregunta: ¿el affaire Mou fue la causa o la consecuencia de que Casillas ya no sea Casillas?