Florentino Pérez y Zinedine Zidane siguen empeñados en vestir a Eden Hazard de blanco. El belga es uno de los jugadores que recomendó Zidane al presidente, cuando éste le incorporó como asesor. En el año 2010 el jugador militaba del Lille y Zizou manifestó lo siguiente respecto a Hazard: "Lo llevaría al Madrid con los ojos cerrados, Va a ser un jugador de nivel mundial". El problema es que Florentino no acertó a ver el crack que ha explotado finalmente en el Chelsea y ahora las posibilidades de ficharlo son remotas.
Sin embargo, ni Pérez ni Zidane tiran la toalla. En las últimas semanas se ha producido una tentativa a través de un intermediario que domina el mercado inglés. El Real Madrid quería conocer la disposición del futbolista a salir y la del Chelsea a traspasarlo y para ello el intermediario llegó a poner encima de la mesa el nombre de Isco. El club blanco estaría dispuesto a incluir en la operación el traspaso del malagueño más una cantidad de dinero a acordar.
Isco no pasa por un buen momento en el club. La rebeldía mostrada por el malagueño tras regresar al banquillo, obligado por la imposición de la BBC (Bale-Benzema-Cristiano), no ha hecho gracia ni al cuerpo técnico ni en la zona noble del Bernabéu. El jugador cree que se ha ganado más jerarquía en el vestuario después de su gran rendimiento y su paso adelante asumiendo responsabilidades que debían asumir otros jugadores que no lo han hecho como Bale. Ese nuevo perfil solidario y trabajador que Isco ha demostrado en la medular acompañando a Kroos y Modric, no ha encontrado premio en los momentos decisivos de la temporada. Isco últimamente pasa más tiempo en el banquillo que en el campo. Y el jugador no ha escondido su malestar y así lo hizo público tras el partido ante el Atlético de cuartos de final de Champions. “Creía que estaba haciendo un buen trabajo y no me puso muy contento dejar de contar”, dijo.
Todo eso ha llevado al club a poner el nombre de Isco encima de la mesa en la tentativa por el fichaje de un Hazard que ya ha advertido que no tiene intención de abandonar el Chelsea. El belga ha renovó en febrero su contrato con el cuadro londinense hasta 2020. "Desde que llegué, en el 2012, me he sentido muy cómodo. El club nunca ha dejado de apoyarme", advirtió el día que se confirmó su renovación. Por si no hubiese quedado claro, al recibir el permio al mejor de la Premier por la Asociación de Futbolistas Profesionales, declaró: "No voy a ir al Real Madrid. Quiero quedarme aquí". Pese a todo, Florentino y Zidane no arrojan la toalla. A todo eso se suma que en Inglaterra hay otros clubes interesados en hacerse con los servicios del internacional español. El diario Metro ha publicado que el Arsenal está dispuesto a pagar 45 millones de euros al Real Madrid para hacerse con los servicios del malagueño. Todo apunta a que los días de blanco de Isco pueen tocar a su fin. Él no está contento y el club lo ha incluido como moneda de cambio en un posible traspaso.