"Nunca he escondido que el Inter y el Chelsea han sido las dos grandes pasiones de mi carrera futbolística. El Chelsea es un club realmente importante para mí", señaló el ya exentrenador del Real Madrid, de 50 años, en una entrevista a la televisión oficial del Chelsea, una vez hecha oficial su contratación por el club de Londres.
El preparador luso regresa a la capital británica nueve años después de llegar por primera vez a Stamford Bridge, en junio de 2004, y reiteró que sigue vigente la declaración de intenciones que hizo pública en aquella ocasión, cuando prometió a los aficionados "calidad, trabajo, amor y pasión para lograr éxitos" con los "blues".
"El mensaje sigue siendo exactamente el mismo, con una única diferencia, que ahora puedo decir que soy uno de vosotros", dijo Mourinho, que ganó dos ligas en las cuatro temporadas en las que dirigió al Chelsea, hasta septiembre de 2007.
El portugués sustituye en el banquillo de Stamford Bridge al español Rafa Benítez, que durante los seis meses que ha dirigido al equipo, con el que ha ganado la Liga Europa, ha visto cómo los aficionados "blue" coreaban el nombre de Mourinho desde las gradas en casi todos los partidos.
"Prometo exactamente las mismas cosas que prometí en 2004", afirmó a la televisión del club Mourinho, que hace nueve años tomó las riendas del Chelsea poco después de proclamarse con el Oporto ganador de la Liga de Campeones. El nuevo entrenador "blue" subrayó que le resultó "muy duro jugar contra el Chelsea" cuando era entrenador del Inter de Milán: "Lo hice dos veces y no fue mal".
Cómo preparador del club italiano, el luso apeó en la temporada 2009-2010 al conjunto inglés en los octavos de final de la Champions en su camino hacia su segunda Liga de Campeones como entrenador. El Inter de Mourinho ganó en la ida por 2-1 en Milán y volvió a derrotar a los "blues" en Stamford Bridge por 0-1.
Se ve que el escueto comunicado con el que Mourinho se despidió del Real Madrid tuvo la inspiración de un autor ajeno al propio técnico. Al menos, su titular: "Desde el corazón, ¡Hala Madrid!". En el corazón de Mou sólo anidan el Inter y el Chelsea.