A una semana del clásico en el Camp Nou y con el Real Madrid dimitido en Liga, el club se aferra a sus opciones de ganar la Liga de Campeones para salvar otro año en blanco. Sería el segundo, dos temporadas en las que se han sentado tres entrenadores por el banquillo blanco: Carlo Ancelotti, Rafa Benítez y Zinedine Zidane. El Real Madrid tratará de salvar la cara en el partido ante el Barcelona para no venirse abajo a una semana de la disputra de los cuartos de final de Champions que le enfrentarán al Wolfsburgo. Una situación que no esconde las enormes dudas generadas por un equipo que no ha ofrecido garantías en el campo y que tiene muchos frentes abiertos de cara a los próximos meses. Florentino debe apagar estos incendios si no quiere que el equipo se vea afectado por la incertidumbre:
1. KEYLOR NAVAS: El portero estuvo a un paso de marcharse al Manchester United, que le ofrecía 4,4 millones de euros netos por temporada. Finalmente se quedó en Madrid, después de que United y Real Madrid no completaran los trámites para el traspaso de De Gea. Entonces Florentino le prometió que se sentaría a rubricar en junio una mejora de contrato para cobrar la ficha prometida por el club inglés. A día de hoy Keylor sigue esperando que el Real Madrid le llame para sentarse a firmar esa mejora, pero no encuentra respuesta por parte de Florentino y su directiva. Navas maneja ofertas de la Premier que mejoran sustancialmente el contrato que tiene en el Real Madrid, donde el trato que se le ha dispensado desde el primer día no está a la altura de su rendimiendto deportivo y su conducta fuera del campo.
2. ISCO Y JAMES: El malagueño está fuera del club. En un principio la llegada de Zidane pareció cambiar su status en la plantilla, pero el abandono físico del malagueño y su desinterés en los entrenamientos ha acabado por molestar al técnico galo, que le ha postergado a un rol secundario, como ocurrió antes con Rafa Benítez. El futbolista tiene una ficha muy baja y ya advirtió que de quedarse, sólo lo haría con una mejora de contrato. Sin embargo, el Real Madrid hace tiempo que no cuenta con él en sus planes de futuro. Ya intentó el año pasado incluirlo en una operación para fichar a Hazard, como desveló Vozpópuli el 13 de mayo del año pasado, y desde entonces Isco se ha dejado querer en la Premier, donde tiene un gran escaparate. Isco saldrá en verano del club, donde le ven como una buena oportunidad de lograr una cuantiosa cantidad de dinero por su traspaso. Se marcha marcado por las palabras de otro ex madridista, Iván Helguera, quien ofreció hace unos meses un pronóstico premonitorio: "Isco no da pases de gol, no mete goles, no va de cabeza, no roba balones. No me está convenciendo. Me gusta que sea creativo pero para desequilibrar. Él podría dar mucho más pero como el Bernabéu le aplaude por hacer una croqueta... ¿En qué acaban sus jugadas".
Por su parte, James no está rindiendo a la altura que se esperaba de él. La llegada de Rafa Benítez fue una mala noticia para el colombiano, que comenzó la temporada renqueante por una lesión sufrida con Colombia. Benítez lo dejó sistemáticamente en el banquillo y el desencuentro se convirtió en una guerra abierta con declaraciones altisonantes en los medios de comunicación. El colombiano no está bien físicamente y eso lo nota el equipo, que necesita alguien con enlace con los de arriba y llegue desde atrás. Su aportación en el Real Madrid esta temporada es muy decepcionante y en las oficinas del club hay que insta a Florentino, el hombre que lo fichó y su gran defensor, a ponerlo en el mercado para tratar de ingresar un dinero por su marcha que se podría utilizar en traer a otra estrella más consolidada.
3. ZIDANE: "No sé si la próxima temporada estaré aquí sentado". Zizou no se muerde la lengia cuando se trata de hablar. Fue presentado hasta final de temporada y con la opción de dos más, pero pasados apenas 100 días, Florentino ha perdido la fe en el entrenador galo. Pérez se aferra al recuerdo de Mourinho, quien ya le ha dado tres negativas. La derrota ante el Atlético de Simeone, que dominó en la pizarra a Zidane, le ha restado credibilidad y opciones de seguir al galo la próxima temporada. Su único salvavidas es la consecución de la Undecima, y ni siquiera eso le garantizaría ocupar el próximo año el banquillo madridista. Sea como fuere, el partido en el Camp Nou puede ser determinante para el futuro de Zidane, más allá de que acabe o no la temporada en el Real Madrid. Hay clubes franceses interesados y él ha demostrado que no es un técnico dócil. Criticó a los servicios médicos tras la lesión de Bale, poniéndose del lado de Ramos y el vestuario, y pidió fichajes de equipo en lugar de 'galácticos' para la próxima temporada a Florentino, presidente y secretario técnico. Podría ser su primera y última visita al Camp Nou como entrenador blanco.
4. CRISTIANO RONALDO: Las cosas transcurren como deben. Después de que Cristiano mostrase el pasado verano su deseo de salir del Real Madrid y Jorge Mendes sondeara el mercado, los guiños entre el portugués y el jeque del PSG, Nasser Al-Khelaifi han sido constantes. El dueño del club parisino mostró su interés entonces, cosa que trasladó a Florentino Pérez. Sin embargo, el club blanco frenó su salida y le emplazó a retomar las conversaciones este próximo verano. El Real Madrid ha puesto como condición su deseo de recuperar el máximo dinero respecto a los 94 millones que pagó por el luso al United. Algo que no parece que pueda ser un problema para el jeque. En las últimas fechas se ha sabido que el PSG ha abierto la puerta a la salida de su estrella, Zlatan Ibrahimovic, para dejar libre su puesto y su ficha para Cristiano. Mientras se van dando pasos con discreción, jugador y club niegan la mayor y advierten que el delantero cumplirá su contrato. Pero Cristiano, como Sergio Ramos, mantiene un pulso con Florentino y tiene clara que este verano sí pondrá fin a su etapa en el Real Madrid.
