El entrenador del Barcelona, Luis Enrique, compareció ante la prensa con un tono que poco tiene que ver con el mostrado en Anoeta tras el sufrido empate ante la Real Sociedad del pasado domingo. El técnico se mostró desafiante en las respuestas y dejó claro que no le preocupa el descenso de nivel y de actitud del equipo de cara al Clásico.
"Debemos mejorar y ser más regulares pero no veo ningún motivo para preocuparme especialmente seguimos siendo favoritos a conquistar todos los títulos pero somos conscientes de que debemos mejorar. No exageraría. Más que exagerasteis el primer año y ganamos el triplete…”, advirtió desafiante a los periodistas.
Preguntado por la falta de soluciones futbolísticas en Anoeta, el asturiano volvió a tirar de sorna: "Entiendo que cuando hay resultados adversos aparecen los champiñones y ¿es época de bolets? Pues de bolets también. Seguimos siendo un equipo que tenemos pólvora y a veces aceleramos demasiado el juego pero la idea sigue siendo la misma. Posesión de balón larga. Sigue siendo la misma filosofía que nos dio ocho o diez títulos. El resto es oportunismo puro y duro".
El entrenador culé utilizó constantemente como justificación el buen final de año de su primera temporada, eludiendo responder a las preguntas de los medios en las que se le pedían un análisis del mal momento de juego. "Si recuerdo el primer año me sale una sonrisa enorme porque más no me pudieron criticar y luego se subieron al carro. Estamos en el proceso lógico de un rival en Liga que está muy fuerte y nosotros no hemos sido regulares. Sería demasiado arriesgado matarnos. Seguro que daremos guerra”, sentenció.
Finalmente quiso dar la cara por Paco Alcácer, delantero llegado para dar descanso a la MSN, que aún no se ha estrenado como goleador con la camiseta culé: "Deberíais dejar a Paco Alcácer en paz. No tiene muchos minutos. No estoy hablando de ti (al periodista) sino en general. No sé cuánto tiempo tardará en ayudarnos. Me parece hasta ridículo hablar de él”.