"Veo muy buena actitud en cada partido y en cada entrenamiento, el problema no es de actitud y me deja tranquilo. El rendimiento a nivel individual y colectivo puede mejorar y en esas áreas de mejora estamos trabajando", manifestó en rueda de prensa.
Ahora, el siguiente paso donde mostrar las mejores es el duelo ante el Granada de este sábado. "Un rival que llega con buenos números, que en fase defensiva es fuerte, rival trabajado con poderío en el juego a balón parado y en transición. Espero un rival que nos pondrá muchas dificultades y a ver si somos capaces de solventarlas", destacó de los nazaríes.
"Mi trabajo es ir mejorando el rendimiento del equipo. Mi trabajo está enfocado a encontrar esa solución, si hay rivales que nos lo complican más es mérito de ellos, no solo demérito nuestro. Cada rival presenta dificultades, intentamos no ser previsibles y vamos a ver si somos capaces de transmitir en el campo esas soluciones", ahondó al respecto.
Y es que al asturiano le interesa ser "superior al rival". "Quiero ganar, conceder menos ocasiones al rival, generar más, y ser merecedores de la victoria. Es una mera anécdota ser líder uno u otro. No tiene ninguna importancia, ni que los que están detrás hayan perdidos puntos", matizó.
"En Málaga no estuvimos finos a la hora de concretar y tenemos que mejorar eso pero no dramaticemos. Hicimos diez remates. Mi discurso ha sido el mismo: seguir mejorando, no será fácil, no son máquinas, son jugadores de fútbol, será difícil", recordó, como ya hiciera después del duelo en Málaga.
Preguntado por Xavi, Luis Enrique explicó que "cuando surgen este tipo de partidos lo valoro todo. Lo respeto todo y necesito a Xavi y al resto cuando lo considere oportuno. Su predisposición es muy buena. Si siempre que no juega, se crea un debate, siempre responderé lo mismo. Yo decido quién juega y seguramente podría haber jugado más con un rendimiento muy alto, pero soy yo el que elige el que juega. Todos sabemos que es un jugador especial, pero las cosas cambian con el paso de las temporadas. Yo lo quiero en mi equipo".
En cuanto a Luis Suárez, el técnico azulgrana fue muy claro: "Que esté pasado de peso son chascarrillos. Esto es un cuerpo de élite, controlados al detalle. En Liverpool no lo vi nunca finito. Ahora, si queréis que hagamos una liposucción, se puede valorar".
