A Luis Suárez, fichaje estrella del Barcelona para la próxima temporada, nadie le ha explicado la tesitura política que se vive en la ciudad y la región donde se instalarán el uruguayo y su familia.
Así, en su carta de despedida del Liverpool, donde jugaba hasta ahora, y de los aficionados ingleses, Suárez no menciona ni una vez a Cataluña, ni siquiera a Barcelona, mientras que sí alude a España en dos ocasiones.
"Con gran tristeza dejo el Liverpool para comenzar una nueva vida y nuevos retos en España", arranca su misiva el delantero suramericano.
"Este club hizo todo lo posible para que me quedara, pero jugar y vivir en España, donde vive la família de mi esposa, es un sueño de toda la vida y creo que ahora es el momento adecuado", añade.
¿Nadie le ha contado a Luis Suárez el polémico y caliente asunto de la pretendida independencia de Cataluña o es que no le da ninguna credibilidad e importancia?
La teoría del desconocimiento cuestra trabajo creerla cuando la familia de su mujer reside en Casteldefells, municipio próximo a Barcelona y, sobre todo, porque su representante es Pere Guardiola.
Resulta extraño que el hermano del entrenador del Bayern, embajador por el mundo del independentismo catalán, no haya puesto en antecedentes políticos al nuevo ídolo del club barcelonés.
