Según dicho informe, y con independencia de que la candidatura hiciera gala de sondeos en los que el apoyo popular era ciertamente elevado, se apunta que casi uno de cada dos españoles (44 frente al 56%) no veía clara la victoria madrileña.
Concretamente, el 64% de los ciudadanos del norte se han mostrado contrarios a la candidatura, lo que supone un 20% más que la media nacional, seguidos por los habitantes de Barcelona capital y provincia (53,5%) y los del noroeste (52%).
Los motivos que alegan se centran en la mala situación económica del país, votada por una amplia mayoría de la población a nivel nacional con un 60,9%. Este porcentaje asciende hasta el 72% en el caso de los ciudadanos del sur y en el 70 en los barceloneses.
El segundo motivo señalado por el 30,8% de la población a nivel nacional es la mala imagen que proyecta España como país hacía el extranjero. Por localidades, los que más inciden en esto son los habitantes del norte (48) y los del noroeste (40), muy por encima de la media nacional.
La tercera razón apuntada es la escasa influencia internacional de la clase política (20,2%). A nivel regional, el 24% de los ciudadanos del noroeste y del centro atribuye la eliminación de Madrid a la poca capacidad de convicción de los políticos españoles.
Los motivos se centran más en la mala imagen de España y de sus políticos, que en la calidad de las otras dos candidaturas respecto a la de Madrid, como señala IPSOS. De hecho, sólo el 13% de los españoles considera que la decisión del COI fue tomada teniendo en cuenta el mayor potencial económico de Tokio o Estambul y tan sólo el 4,2 cree que las candidaturas de las otras dos ciudades eran de mejor calidad que la de Madrid.
En cuanto a la puesta en escena ante los miembros del COI, el ya famoso "relaxing cup of café con leche" no convenció a los españoles, quienes señalan la poca calidad de la presentación como razón de la eliminación (10,5%). En el caso de las regiones del noroeste, este porcentaje alcanza casi el doble, el 19,9.
Otra de las cuestiones abordadas por el infome de IPSOS ha sido la intención anunciada por Barcelona de presentarse como ciudad candidata a los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022. Ha sido bien acogida por el 44% de la población mientras que un 24,3 lo considera negativo. Al 29,2 le da igual.
Aquí también existe sesgo por zona geográfica ya que el 62% de los barceloneses apoya la intención de su ciudad, seguido de casi el 55 de los habitantes del noreste. En Madrid, el 33 la consideran una decisión positiva y el 30 por ciento justo lo contrario.
Para la elaboración de este informe se han realizado mil entrevistas en España a adultos de entre 18 y 64 años, con un margen de error de un 3 por ciento aproximadamente.
