Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), presume a menudo del poderío del campeonato español. Y no son pocos quienes se lo creen y le ríen la ocurrencia. Pero la realidad, tozuda, le contradice casi a diario.
La última noticia es el llamado “contrato del billón de dólares” que va a firmar el Manchester United con Nike. La marca norteamericana seguirá vistiendo al club inglés durante los próximos diez años y le pagará 1.000 millones de dólares, unos 700 millones de euros.
Es decir, el United recibirá 70 millones de euros al año, prácticamente la suma de lo que también Nike paga anualmente al Barcelona (30 millones) más lo que Adidas abona al Real Madrid (40 millones).
Hace apenas cuatro meses, el Barcelona y Nike ampliaron hasta junio de 2018 el acuerdo que tenían, a razón de 30 millones de euros por temporada. El Madrid, por su parte, tiene contrato con Adidas hasta 2020. La marca alemana abona unos 40 millones anuales al club blanco.
El Manchester United ha logrado tan estratosférica cifra después de un duro pulso con Nike. Se dejó querer por Adidas, por Puma… hasta que la multinacional con sede en Oregón claudicó.
De hecho, la firma estadounidense era la única que, por contrato, podía negociar con los reds de Manchester durante el año 2013. No hubo acuerdo. Al contrario, las posturas de ambos se enquistaron y todo parecíaa abocado a la ruptura en 2015, cuando expira el acuerdo todavía vigente.
De hecho, el pasado mes de diciembre los dueños norteamericanos del United ordenaron quitar las butacas blancas que formaban el logotipo de Nike en una de las tribunas de Old Trafford y sustituirlas por otras del color rojo predominante en el estadio.
La dureza de la directiva del Manchester habrá triunfado si, como dan por seguro los medios ingleses, en breve se hace oficial el "contrato del billón de dólares".
