“Las cosas nos saldrán después mejor o peor, pero ganas, ambición y actitud nos sobran”, sentenciaba Pau Gasol ante la prensa tras incorporarse por fin a la concentración de Sergio Scariolo. El ala-pívot de los Chicago Bulls, que aterriza en dinámica de selección después de disputar el histórico NBA Africa Game en Johannesburgo, es consciente de que a la presión por sacar un billete para los Juegos Olímpicos de Río se unirá la novedad de un estilo de juego que va a sufrir algunas modificaciones.
A día de hoy, Quino Colom, Xavi Rabaseda, Dani Díez y Pablo Aguilar son los baloncestistas más señalados de la preselección de dieciséis. De confirmarse esas bajas, que se unirían por diferentes circunstancias a las de Marc Gasol, Serge Ibaka y Juan Carlos Navarro, el seleccionador transalpino contaría con un plantel en el que despuntarían tres características: movilidad, polivalencia y una atractiva querencia por el juego vertiginoso.
Scariolo tratará de replicar el exitoso estilo que ha convertido al Real Madrid de Laso en referencia
Una mezcla interesante de piernas frescas y un ramillete de veteranos acostumbrados a correr y a defender con intensidad ofrece a Scariolo la oportunidad de plasmar una idea que le ronda la cabeza desde que volvió a ponerse al volante de la selección española: tratar de replicar el exitoso estilo que ha convertido al Real Madrid de Pablo Laso en la referencia baloncestística de Europa. No tanto aquel de hace dos temporadas, que dejó cierto regusto a fuegos artificiales, sino el mucho más sólido y canchero que ha hecho del equipo blanco una máquina de competir en ambos lados de la pista.
El de Brescia reconduciría así la ausencia de dos efectivos tan voluminosos como Ibaka y Marc Gasol y de un jugador como Juan Carlos Navarro, al que los problemas físicos han derivado en un escolta cada vez más estático. Además, el ex entrenador del Baskonia ya convino con la dirección deportiva de la Federación el contar como tercer base con Guillem Vives, más enérgico, en lugar de con Raül López, más del gusto de Scariolo en un principio pero tendente a sufrir con un ritmo alto.
La preparación física, muy presente en los primeros entrenamientos del combinado nacional, sirve como prólogo de lo que el espectador se encontrará en el Eurobasket: un conjunto que abrirá brecha en estático, con Pau Gasol como faro, pero que matará muchos encuentros acribillando con sus contraataques.
Precisamente el acomodo de Pau a este estilo es uno de los principales atractivos, y a su vez desafíos, del equipo de Sergio Scariolo. Además de maximizar las características de la columna vertebral madridista de la Selección e intentar, como ellos durante la temporada invernal, no abandonar la senda de la victoria este verano.