Florentino Pérez logró que Casillas se marchase cansado de la presión de los medios, de parte de la afición y del maltrato por parte del club. El presidente negó a Iker el cariño que le ha dado a Pepe, un central que dentro del vestuario siempre se ha levantado sospechas por ser parte del núcleo duro de Mourinho, aunque su relación con el técnico portugués terminó muy desgastada. Tanto que en una conversación posterior con Florentino, el técnico le recomendó prescindir de tres jugadores: Casillas, Sergio Ramos y el propio Pepe.
Cuando Mourinho se marchó, se especuló con la probable salida de Pepe al Chelsea, pero el jugador se quedó en el Real Madrid. Y su status cambió soprendentemente en el vestuario. Florentino le hizo una mejora sustancial de contrato y se convirtió en uno de los hombres del presidente. Pepe pasó a formar parte de los capitanes, por su antigüedad en el club (llegó en 2007), y se convirtió en uno de los portavoces del vestuario blanco.
Las relaciones del vestuario con el presidente, especialmente la de los pesos pesados, no son las mejores. Iker Casillas no mantenía ninguna relación con él y Sergio Ramos vivía un tira y afloja por el tema de su renovación. Además los dos se habían significado contra Mourinho y Pérez se declaró mourinhista desde el primer momento. A todo eso se sumaba la frialdad con la que Cristiano Ronaldo se relaciona con Florentino tras un par de encontronazos, tras la negociación de su mejora de contrato y por el favoritismo de Pérez por Bale. En medio de todo este escenario, Pepe mostraba una cercanía con el presidente que ha levantado muchas suspicacias en el vestuario. Desde dentro se ha llegado a filtrar que es el Topo del presidente, siempre informado de lo que ocurre dentro del mismo.
Así que Pepe extiende su vinculación con el Real Madrid para alegría de Floirentino e inquietud de algunos de sus compañeros. que siguen señalando al central como el informador del presidente. Se marchó Casillas, pero parece que no se ha ido el Topo...