Lo dijo Paco Fernández, técnico del Racing: "Hoy era el partido más importante de nuestras vidas y lo hemos cambiado por la dignidad". Es difícil resumir mejor el triste y bochornoso espectáculo que anoche se vivió en El Sardinero, donde el equipo santanderino cumplió su amenaza y se negó a jugar contra la Real Sociedad la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey.
El Consejo del club cántabro, con su presidente, Ángel Lavín al frente, se negó a presentar la dimisión, tal y como había exigido la plantilla y el cuerpo técnico, y cuando el árbitro del partido, Gil Manzano, ordenó sacar de centro, los once jugadores del Racing se fueron al centro del campo y se abrazaron.
Así estaba previsto y así ocurrió. Cuando ambos equipos saltaron al terreno de juego, el público los recibió con el grito de "¡No se juega, no se juega!", además de continuar profiriendo eslóganes contra los dirigentes racinguistas, que ni siquiera hicieron acto de presencia en el palco.
Cuando los jugadores locales abandonaron el terreno de juego, la afición se mantuvo en sus localidades alternando cánticos de apoyo al Racing, con el ya habitual grito de "¡Fuera chorizos del Sardinero!". Eso hizo que la plantilla volviera a salir al campo y se acercara hacia 'la gradona' en la que se ubican los incondicionales seguidores racinguistas, para aplaudirles por su apoyo y por la lucha que han mantenido durante meses contra los actuales dirigentes del club.
"Sentimos mucho haber tomado esta decisión", explicó un emocionado Paco Fernández, "pero lo hemos hecho por respeto al fútbol y a nosotros mismos", explicó. Aunque comprensible, lo vivido en El Sardinero es una vergüenza para el fútbol español, cuyos dirigentes volvieron a demostrar que están más preocupados de encubrirse entre ellos -ahí está el caso de la petición de indulto para Del Nido- que de velar por los intereres de clubes, jugadores y aficionados.
A la espera de la reunión del Comité de Competición que tendrá lugar este viernes en la Federación Española, el Racing perdió el partido (0-3) y la Real Sociedad se clasificó para las semifinales de Copa, en las que se enfrentará al Barcelona. "Ha sido una situación incómoda para nosotros, pero más incómoda es para la gente del Racing", dijo Jagoba Arrasate, entrenador de la Real. "Hoy se ha visto que el racinguismo está muy vivo".
"Confiamos en que no tengamos sanción porque nosotros no somos los malos", sentenció el técnico del Racing. Cabe recordar que el Barcelona hizo algo parecido en el año 2000 y finalmente quedó sin sanción. Sería el colmo que después de todo lo que están pasando, los jugadores del histórico equipo santanderino encima fuera castigados.