A Cristiano Ronaldo se le ha acabado la bula. El Comité Técnico de Árbitros ha dado órdenes a los colegiados para que estén muy atentos a las aciones del jugador portugués del Real Madrid, que está dejando en mal lugar a los colegiados al protagonizar hasta cinco acciones claras de agresión a rivales en los últimos tres meses. Las imágenes han corrido como la pólvora por las redes sociales y el Comité Técnico de Árbitros ha tenido que tomar medidas, advirtiendo a los colegiados que sigan de cerca los movimientos del madridista.
Cristiano es un competidor infatigable al que su declive físico irá haciendo perder protagonismo. Su carácter ganador y su descomunal autoexigencia le generan una ansiedad en el campo que se plasma con gestos de desaire a árbitros, compañeros y agresiones claras a rivales como las que ha protagonizado en estas últimas jornadas. A día de hoy David Simón (Las Palmas), Krychowiak (Sevilla), Alves (Barcelona), Nacho Cases (Sporting) y Molinero (Betis) han pagado la frustración del luso en forma de patada, codazo o puñetazo.
En el Real Madrid están preocupados con estos episodios y Zinedine Zidane, entrenador del luso, ha hablado con el jugador para tratar de aplacar su furia. Zizou sabe de lo que habla, porque era un jugador que recibía marcajes estrechos, golpes y provocaciones. La más famosa, la que le sacó de sus casillas en la final de 2006, en la que dio un cabezazo al italiano Materrazzi después de que este la nombrase a su hermana. Cristiano tendrá que tener cuidado en los próximos partidos y sus marcadores también, porque los ojos del colegiado, los asistentes y el cuarto árbitro estarán muy pendientes del luso y de lo que ocurra a su alrededor.