El Real Madrid sigue trabajando en el mercado para completar una plantilla algo desequilibrada defensivamente, en opinión de su técnico, Rafa Benítez, y para ello ha cerrado el fichaje del portero del Espanyol, Kiko Casilla, y tiene muy avanzadas las negociaciones con el central argentino Ezequiel Garay. Un futbolista que ya militó en el club de Chamartín, pero al que las lesiones impidieron actuar con regularidad en el equipo blanco.
Las negocaciones por el fichaje del portero se habían ralentizado en las últimas horas, después de que Van Gaal admitiese que el United está buscando un portero en el mercado para suplir la hipotética salida de De Gea. El United abriría la puerta al traspaso, pero sigue exigiendo incluir en la negociación el fichaje de Ramos. La opción de Casilla se ha acelerado y el Real Madrid ha cerrado el fichaje en un importe cercano a los 6 millones de euros. El portero del Espanyol, que se formó en la cantera del Madrid, renovó hace poco hasta 2018 y tenía una cláusula de rescisión de 20 millones de euros.
Por su parte, el jugador, actualmente en el Zenit de San Petersburgo, gusta mucho al técnico y dejó una buena imagen en el club. Su fichaje entraría en los márgenes económicos que se ha propuesto el club y además tiene pasaporte comunitario. En su día el Real Madrid vendió el 50% de sus derechos fueron vendidos al Benfica por 5,5 millones. Hoy Garay es indiscutible en su club y en la selección argentina, junto a Otamendi. Otro jugador por el que se ha interesado el club blanco, pero cuyo traspaso ascendería a 50 millones (su cláusula de rescisión) y no cuenta con pasaporte comunitario.
