A sus 36 años Ronaldo sigue disfrutando de la vida. Embajador de Brasil para el Mundial del año próximo, el Fenómeno ejerce de anfitrión impecable e inolvidable.
Que se lo digan a Messi, uno de los invitados a la fiesta que Ronaldo organizó en el lujoso Hotel Encore de Las Vegas. Las fotos lo dicen todo: juerga en la piscina con mujeres y copas en abundancia. El argentino había jugado el día anterior en Chicago la última de sus exhibiciones benéficas.
Ronaldo ahora es empresario y representante. Por eso estaba en Las Vegas, donde uno de sus representados, Anderson Silva, compite en UFC (artes marciales mixtas).
El brasileño, que siempre se ha tomado con calma su profesión, hizo un alto en su labor empresarial y, según publicó el diario O'Globo, cerró la piscina del hotel para disfrute suyo y de sus amigas y amigos. Entre estos, otros virtuoso brasileiro del fútbol también retirado: el exdeportivista Djalminha. Según se aprecia en las fotos, también pasó un buen rato.