-¿Cómo se están viviendo estos acontecimientos que salpican a la FIFA en The Guardian?
The Guardian siempre se ha caracterizado por investigar la relación entre las instituciones y la corrupción. Y en este caso tengo varios compañeros que llevan siguiendo el tema desde hace tiempo. Tiene que ver con la personalidad de nuestro medio. Además tratamos de no darle un enfoque localista. No buscamos en qué afecta o que gana Inglaterra con esto. Se trata de ir al origen del problema, depurar posibilidades.
-¿Y qué relación ve entre el fútbol español y todo esto?
La gestión del fútbol español es cuanto menos cuestionable. Por mi interés propio, como corresponsal en España, sigo el tema por todo lo que afecta al presidente de la Federación Española, Ángel María Villar. Es cierto que la justicia suiza ha anunciado que le va a intrerrogar, pero hay que recordar que de momento no está imputado. Pero también es cierto que se trata de un dirigente que no destaca por su transparencia y su capacidad de comunicación nula. Aunque detrás de esto vuelve a resurgir la lucha existente entre Tebas y Villar. Creo que el nuevo decreto-ley aprobado es una nueva Constitución, y si se me permite, un golpe de Estado a la anterior. El poder ha pasado de la Federación a la LFP y el CSD. Y ahí entra la FIFA como garante de la independencia del fútbol, asistiendo a la Federación, que denuncia la injerencia.
-¿Cree que Blatter puede ganar las elecciones pese al escándalo?
Perfectamente. Siempre terminan saliendo adelante. No diría que es una actitud fatalista, pero no sé si sirve para cambiar algo que se vaya Blatter. Porque al final votan los mismos tipos con intereses personales y motivaciones propias. Quizá la clave no sea la reelección, sino la credibilidad que va a perder la FIFA si Blatter se mantiene al mando de la institución. Saldrán más escándalos... El problema de Blatter no vendrá de la FIFA. Vendrá de Paltini, de los políticos...
-Villar quedaría muy mal posicionado si no sale reelegido Blatter...
Es que en Europa sólo apoya a Blatter Villar. Bueno, Villar y Putin. Porque esto va mucho más allá del fútbol. Se trata de tapar escándalos y callar bocar y de la capacidad que tengan para hacer eso. La de Putin es muy grande. Por otro lado, creo que mientras hay algunos que tapan o niegan, Villar es más de los de ladran, pues cabalgamos. Y al final puede seguir ahí.
-¿El poder de la FIFA trasciende al de los estados?
El problema es que FIFA y COI son dos estados poderosos que condicionan hasta los impuestos a cobrar cuando organizan eventos en el suelo de cualquier país. No son estados como tal, porque no hay jurisprudencia sobre ellos y es difícil juzgarlos en otros países. Ahora el problema es que se han encontrado con el estado más poderoso, Estados Unidos, y parece que se les ha complicado el asunto. Hay que recordar que a Blazer lo tenía pillado EEUU por Hacienda y ha sido él quien ha colaborado con el FBI.
-¿Y en Inglaterra cómo se vive todo esto?
En Inglaterra hay cierta sensación de alegría, más que de sorpresa. Por fín se les ha pillado. Siempre se ha concebido la FIFA como una insitución corrupta, pero ahora se constata. Aunque me parece venatjista, porque Inglaterra ha entrado en su juego cuando le interesaba. Cameron se ha limitado a hacer lo que debía, pedir la renuncia de Blatter.
