El pasado domingo 10 de marzo, en Maspalomas, ocurrieron unos hechos de esos que uno creía ya olvidados en el baúl de los recuerdos del inframundo del fútbol de décadas pasadas.
En el duelo de Segunda Federación disputado en Maspalomas entre el equipo local, la UD San Fernando, y la Gimnástica Segoviana, se llevaron a cabo una serie de comportamientos que, de momento, han quedado sin sanción.
Durante el pasamanos y saludos iniciales, como se puede ver en el vídeo, los jugadores del UD San Fernando no sólo negaron el saludo al dorsal 18 de la Segoviana, Dani Plomer, sino que dos de ellos, el dorsal número 4 y el dorsal número 8 (Stephane y Alemán, respectivamente) escupieron al propio Plomer. Este, tras lo sucedido y antes del saque inicial, se fue a denunciarlo al árbitro, que le contestó: "¿Ya empezamos?". De este acto no quedó reflejo nada en el acta arbitral, que ya ha sido impugnado por la propia Segoviana, basándose en las imágenes del vídeo. Desde el club esperan que la Federación Española de Fútbol tome cartas en el asunto.
Una encerrona intolerable y premeditada
Para poner en contexto la situación, señalar que el partido ya venía caliente en la previa, porque en el partido de ida, celebrado en Segovia, hubo altercados al finalizar el encuentro, con sanciones para miembros de ambos equipos.
Consciente de ello, de lo que podía suceder en Maspalomas, la Segoviana pidió presencia de la Policía en el terreno de juego canario, algo que sólo sucedió en la segunda mitad, cuando el ambiente era demasiado tenso, y porque fue el propio club segoviano el que hizo la llamada.
A pesar de apelar a la deportividad durante la semana previa por parte del plantel segoviano y a pesar de que la UD San Fernando dijo que no habría problemas de ningún tipo, la realidad fue muy diferente. El partido, que suele emitirse en la plataforma de Football Club, no se emitió curiosamente este fin de semana. Sin embargo, el vídeo grabado por uno de los 50 aficionados segovianos presentes en el campo el pasado domingo pudo captar al menos lo que sucedió antes del duelo.
Luego, durante el mismo, los insultos y provocaciones a los jugadores recordaron a encerronas pasadas.
Pudo haber sido peor
Plomer, el jugador escupido, fue cambiado alrededor del minuto 60 de partido y tras ducharse y ser vigilado por un directivo de la Segoviana, tuvo que abandonar el estadio protegido por ese mismo directivo, ya que peligraba su integridad física, con amenazas directas, según informan diversos medios segovianos. Debió marcharse en taxi al aeropuerto y esperar al resto de la expedición segoviana
La Sego cayó derrotada por 1-0.