Zinedine Zidane ya tienen una hoja de ruta marcada en su carrera como técnico. El francés, que ha comenzado su andadura en los banquillos dirigiendo al Castilla, saldrá temporalmente del Real Madrid, donde Carlo Ancelotti tiene contrato hasta 2017, tras prorrogar un año más su vinculación.
Florentino Pérez le ha insistido en su intención de sentarle en el banquillo blanco durante su estancia como presidente madridista. De hecho, es una de sus tres obsesiones, junto a la conquista de la Décima y la renovación del Santiago Bernabéu, que ahora anda aparcada. Zidane y el presidente han hablado sobre su futuro y el acuerdo al que han llegado es que Zizou se marchará a seguir su formación como técnico a Francia, en calidad de entrenador de algún equipo de la liga francesa.
Posteriormente retornaría a la Casa Blanca para hacerse con los mandos del primer equipo, que, si no ocurre ningún contratiempo, será dirigido por Carlo Ancelotti hasta junio de 2017. Esto permitiría a Zidane trabajar un par de años fuera, en una decisión consensuada que habría sido bien recibida por todas las partes, incluido el propio Carleto.
Zizou ya conoce el interés de varios clubes, el primero, el Girondins, que hizo pública su intención de contratarle como entrenador antes de que se hiciera cargo del Castilla el verano pasado.