Eugenia Silva, de 45 años, ha comenzado con mal pie sus vacaciones: se ha quemado parte del rostro cuando se encontraba de vacaciones con su marido Alfonso de Borbón y sus hijos Alfonso, de 6 años y Jerónimo, de 4, en Formentera donde la familia tiene una casa de playa en Can Eu.
La modelo tuvo que viajar de la isla pitiusa a Palma de Mallorca para atender unos asuntos relacionados con su agenda profesional y cuando regresaba a Ibiza, sufrió un accidente en el avión el que viajaba, se quemó la cara con una bebida que estaba hirviendo.
Los miembros de la tripulación tuvieron que atenderla y hacerle unas curas de urgencia, antes de aterrizar y después fue atendida por un equipo médico.
Eugenia Silva: "Me abrasé la cara con un té hirviendo"
La empresaria ha querido contar lo sucedido con sus seguidores a través de un Story de Instagram, donde ha aparecido con un apósito de gran tamaño que le cubría la barbilla.
"Anoche, en el aeropuerto de Palma de Mallorca me abrasé la cara con un té hirviendo. No es grave, pero tengo que estar así varios días", ha escrito.
En la imagen, a Eugenia Silva se le puede ver con gesto serio. El percance le ha interrumpido las vacaciones, al menos durante unos días, y tendrá que tener mucho cuidado con que no le de el sol en la quemadura para evitar que le queden secuelas o marcas en la cara, algo que podría perjudicarle en su trabajo ya que es imagen de importantes firmas de moda y belleza con las que trabaja.
En otra foto que ha publicado en su Instagram, Silva aparece de nuevo con la parte inferior cubierta con un gran vendaje y ha lamentado: "Not my favourite summer" (No está siendo mi verano favorito).