Casi una semana después de la gran fiesta de graduación de Irene Urdangarin, la reunión de los Borbón sigue dando de qué hablar. Y es que, tras descubrirse la tensa conversación que mantuvieron el rey Juan Carlos e Iñaki Urdangarin en Ginebra, y el dineral que ambos pagaron por la fiesta, ahora ha salido a la luz los motivos por los que la familia de Iñaki Urdangarin no viajó hasta Suiza para una ocasión tan importante. Una notable ausencia que, aseguran, tiene que ver con el padre de la infanta Cristina.
Fue el pasado 16 de junio cuando, tal y como estaba previsto, la hija pequeña de los exduques de Palma celebró su graduación y su mayoría de edad (cumplió 18 el pasado 5 de junio). Hasta Ginebra se trasladaron los Borbón casi al completo (con la sonada falta de los reyes Felipe y Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía). Sin embargo, de la familia de Iñaki Urdangarin tan solo pudimos ver a su madre, Claire Liebaert. Y es que, en contra de lo esperado, ninguno de los hermanos ni de los sobrinos del exdeportista estuvo presente.
Una ausencia que no pasó desapercibida y que ahora aseguran estaría relacionada con el mismísimo rey Juan Carlos.
La familia de Iñaki Urdangarin no acudió a la graduación por el rey Juan Carlos: "Le culpan de todos sus males"
Según señala ‘Vanitatis’, muchos de los familiares de Iñaki Urdangarin tenían previsto acudir a la graduación de Irene Urdangarin. Unos planes que finalmente decidieron cambiar: “Para ellos es difícil enfrentarse a la figura potente y enorme del rey Juan Carlos I”.
Al parecer, y tal y como se ha especulado en los últimos años, los Urdangarin responsabilizan al padre del rey Felipe VI de la situación que vive y ha vivido Iñaki Urdangarin: “A él lo culpan, aunque sea de forma velada y en petit comité, de todos los males ha sufrido Iñaki. Incluso de la separación de los exduques de Palma, una ruptura que ha dolido profundamente a todos los hermanos”.
Y es que, desde que comenzara su relación con el exdeportista en 1996, la infanta Cristina ha sido una más de la familia Urdangarin, quienes han querido y apoyado a la hija del rey emérito en todo momento. Una unión que aún siguen manteniendo, tal y como vimos hace unos meses cuando la Infanta viajó a Estados Unidos a la boda de uno de los sobrinos, y por la que aún ha llamado más la atención la ausencia de ellos en la graduación.
Tal y como apunta el citado portal, no estaba la hermana mayor del exdeportista, Ana Urdangarin, una de las grandes amigas de la infanta Cristina y muy cercana a su sobrina Irene, como tampoco estuvo presente Mikel ni Clara, también muy unidos durante años al ya exmatrimonio. Tampoco viajaron a Ginebra ninguno de los sobrinos de Iñaki Urdangarin, con los que la homenajeada ha pasado vacaciones y veranos.
Unas marcadas ausencias que dejan claro que aunque los Borbón han dado muestra de una unión que no veíamos desde hacía años, con los Urdangarin la situación es complicada. “La relación de la familia Urdangarin con los reyes eméritos, en especial con el rey Juan Carlos I, está rota desde hace años. Es mucho más que tensa, es malísima. Así que todos, al completo, decidieron no acudir a la graduación para no tener que enfrentarse a una reunión que pocos tenían ganas de mantener”.
Según apuntan las fuentes a ‘Vanitatis’, “el calvario de la prisión que sufrió el todavía marido de la Infanta es algo que sus hermanos no olvidarán nunca”. Así, recuerdan una frase que en su momento aseguran dijo Ana Urdangarin, que dejaba clara su postura sobre lo que le estaba sucediendo a Iñaki Urdangarin: “Si mi padre viviera, ardería Zarzuela”
Quién sí estuvo presente fue la abuela paterna de Irene Urdangarin, Claire Liebaert, quien apenas se soltó de la mano de su hijo, “e hizo de tripas corazón y viajó hasta Ginebra para encontrarse con sus exconsuegros”.
Iñaki Urdangarin estuvo muy pendiente de su madre, quien durante el acto de graduación se sentó junto a la infanta Cristina, a quien siempre ha estado muy unida. De hecho, aseguran que la matriarca de los Urdangarin aún no ha querido conocer en persona a Ainhoa Armentia, pareja del exdeportista, por el gran cariño que siente a la que durante más de 20 años ha sido su nuera.
Pelosi
Es que el golfante del Emérito es impresentable para cualquier persona normal, y los Urdangarín lo son. Los Borbones son unos vainas, los buenos acabaron con Carlos III. Y este chico Urdangarín ha sido el parapeto del golfante y de la Infanta, y sabe muuuuucho; por ésto se ha puesto duro en la negociación del divorcio, provocando la patética escala del golfante en Vitoria en su último viaje. El Emérito nunca volverá a España, porque el país le trae al pairo, lo único que le importa es su dinero, opaco para Hacienda, con el que paga todos los excesos que comete, como este viaje al hotel más caro de Suiza. Espero que el PP y VOX, si gobiernan, no faciliten su vuelta a cualquier precio: debe declarar a Hacienda y pagar sus deudas y recargos antes de que se le permita entrar. En cuanto a la causa penal correspondiente, se le puede indultar.