El pasado mes de diciembre, Kim Kardashian dio a luz a su segundo hijo, Saint, y desde entonces no ha parado de ir de quirófano en quirófano para tratar de recuperar su figura en el menor tiempo posible.
Según publica la web Radaronline.com, la socialité ha visitado ya cinco veces en la última semana a un cirujano plástico. Entre las operaciones que se ha practicado estarían el estar rellenándose los glúteos de nuevo ya que al parecer, y según ha publicado también The National Enquirer, se le habrían estallado las prótesis comenzando a drenar líquido hacia sus caderas, por lo que tuvieron que intervenirla de inmediato. Sin embargo, ella siempre ha negado tener glúteos falsos.
Entre otro de los retoques a los que se ha sometido es un rejuvenecimiento vaginal a través de láser. Su hermana Kourtney es la que le habría aconsejado que se lo hiciera como regalo para ella y su marido, tras dar a luz por segunda vez.
El vídeo prono de Kim ¿lo ha filtrado su propia madre?
A pesar de que Kardashian siempre se ha mostrado muy molesta por la filtración de un vídeo porno con su expareja, Ray J., ahora el libro Kardashian Dynasty, de Ian Halperin, asegura que fue la propia celebrity la que firmó un contrato con la empresa Vivid Entertainment para filtrar el material íntimo que había grabado en 2003 con su exnovio. De acuerdo con el portal TMZ, el autor buscó a un portavoz de la productora que filtró el video para dar mayor credibilidad a la información, y éste lo confirmó.
Según publican los medios americanos, un amigo de Kim comentó al autor, Halperin, que “fue Kris [la madre de Kim y su representante] quien diseñó el acuerdo detrás de bastidores y fue responsable de que el video saliera a la luz” y añadía: “Te puedo decir que la filmación de Kim Kardashian salió en 2007 y ha amasado millones. Cuando se trata de un sex tape, ambas partes tienen que firmar”.
El video sexual se dio a conocer en 2007, poco después Kim debutó en televisión con el reality Keeping up with the Kardashians con el que Kim y su familia alcanzaron la fama, y motivo que les llevó a filtrar este vídeo, ya que les aconsejaron que haciendo esto, su fama subiría como la espuma y así fue.
El libro indica que este tipo de videos pornográficos son muy comunes entre las famosas internacionales. Ellas prefieren vender las cintas antes de que se hagan públicos y las lanzan de tal forma que parecen haber sido robadas, como fue el caso de Kim que amenazó públicamente con emitir una demanda a la productora, algo que fue imposible puesto que la empresa llegó a pagarle 5 millones de dólares a la protagonista.